El gobernador kirchnerista Juan Manuel Urtubey buscará en los comicios de mañana acceder a un tercer mandato consecutivo e igualar así la marca de su principal contrincante, el actual senador nacional del peronismo disidente Juan Carlos Romero, quien cuenta con el apoyo del candidato presidencial del Frente Renovador, Sergio Massa.
Pese a que el sistema ya fue aplicado progresivamente en el distrito, las elecciones generales de este domingo serán las primeras en las que se definirá un gobernador vía voto electrónico en la totalidad de las mesas, en una modalidad alabada por su rapidez para el conteo al final del día pero criticada –especialmente por la oposición– por ser pasible de manipulación.
Urtubey llega a la compulsa con un importante colchón de votos de diferencia frente al resto de los candidatos a gobernador, tras la muy buena victoria en las Paso del 12 de abril último. Allí, el mandatario le sacó 14 puntos de ventaja a Romero.
El jueves tuvo lugar el cierre de campaña, por cierto bastante especial, para ambos postulantes. En una lógica inusual en el país, Urtubey y Romero dejaron de lado el vedettismo que muestra una porción de la política nacional y desplegaron un debate televisivo en el Canal 9 de Salta, entre las 19.30 y las 20.30, poco antes del partido que quedó trunco entre Boca y River por la Copa Libertadores, en la Bombonera.
Durante el debate que ambos realizaron bajo un marco de respeto destacable, Urtubey enumeró todos los avances en obra pública y en la lucha contra la pobreza, pese a que la provincia se encuentra en los últimos escalones a nivel nacional.
Romero, en tanto, exigió la jornada completa en todas las escuelas, la integración de todas las fuerzas de seguridad para luchar contra el narcotráfico, y pidió a los salteños que el domingo “revisen bien lo que votan”.
Urtubey, quien desistió del sueño presidencial 2015 (dijo en reiteradas ocasiones que no aceptará ser vice de la fórmula que disputarán el 9 de agosto el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, y el ministro del Interior y de Transporte, Florencio Randazzo), lleva como compañero de binomio al intendente capitalino Miguel Isa, quien bajó sus aspiraciones de comandar la provincia. En tanto, Romero está acompañado por el empresario y ex diputado nacional Alfredo Olmedo.
En caso de un muy probable triunfo oficialista, el búnker del mandatario salteño quedará regado de enviados del gobierno nacional, deseosos de dejar atrás los pálidos resultados en ciudad de Buenos Aires, Santa Fe y Mendoza.
Se espera que arriben, en espejo a lo ocurrido en abril pasado, los presidenciables Scioli, Randazzo y el jefe de Gabinete nacional y precandidato a gobernador bonaerense, Aníbal Fernández, entre otros.
Quien dio un último impulso a Urtubey fue la primera dama bonaerense y presidenta de la Fundación Banco Provincia, Karina Rabolini, quien arribó a Salta para inaugurar una fábrica. “El pasado cercano nos hace dar cuenta hacia dónde queremos ir. No le estamos regalando nada a nadie, estamos haciendo valer sus derechos”, resaltó en el acto el mandatario.
Un escalón por debajo de la compulsa Urtubey-Romero se instala la lucha por el tercer lugar que mantendrán los candidatos del Partido Obrero, Claudio del Plá, y de la UCR, Miguel Nanni. En las Paso, el postulante de izquierda venció por menos de un punto.
No obstante, la contienda electoral más interesante de mañana se dará en la capital salteña. Fue uno de los objetivos de Urtubey para el debate del jueves, en el sentido de arrastrar adhesiones donde es más resistido.
Si de importancia territorial y de votos –40 por ciento del padrón– se trata, la capital acaparará toda la atención. Allí, el departamento que comanda Isa podría terminar en manos del massista Gustavo Sáenz, el postulante de Romero que venció en las Paso, de manera inesperada, al diputado nacional del PRO, Guillermo Durand Cornejo, quien contaba con el aval del presidenciable Mauricio Macri.
El rival de Sáenz será el diputado provincial por el oficialismo Javier David, quien entre otros cargos fue secretario de la Función Pública, secretario general de la Gobernación y ministro de Hacienda y Obras Públicas de Salta durante las gestiones de Romero, quien comandó el distrito entre 1995 y 2007.
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