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Romney tiene cowboy propio

El cierre de la convención republicana tuvo como orador invitado al director y actor de Hollywood Clint Eastwood, quien realizó una dura crítica al presidente Barack Obama, a quien se dirigió hablándole a una silla vacía, y se desató polémica.


Mitt Romney aceptó formalmente el jueves por la noche la nominación como candidato presidencial del Partido Republicano para las elecciones del 6 de noviembre en un clima de euforia. Pero la nota del acto, en Tampa, Florida, la dio la estrella invitada: el director y actor Clint Eastwood. El protagonista de innumerables películas de cowboys dio una polémica diatriba contra el presidente Barack Hussein Obama, a quien se dirigió hablándole a una silla vacía, lo que fue celebrado por el público presente, pero se convirtió ayer en la principal discusión en los medios de comunicación y en las redes sociales.

“Acepto la nominación”, declaró visiblemente emocionado Romney ante los delegados del partido, en el último día de la convención republicana celebrada en Tampa, Florida.

Romney se bañó de una multitud a la que respondió con las promesas que querían escuchar: crear empleos, derogación de la reforma de salud bautizada “Obamacare”, que asegura cobertura a la mayoría de los estadounidenses, y prosperidad en todos los frentes  de la sociedad.

La clausura de la 40º Convención Nacional del Partido Republicano sirvió para probar que Romney es capaz de animar eventos masivos, pero fue Eastwood, la estrella de Hollywood, quien disparó las polémicas más fuertes al realizar un dialogo contra Obama a quien se dirigió hablándole a una  silla vacía.

El héroe de Harry el sucio, o el pistolero del western spaghetti de El bueno, el feo y el malo o Por un puñado de dólares, fue aclamado por la audiencia del Tampa Bay Times Forum. La figura del cine, un reconocido republicano,  denunció como una “vergüenza nacional los 23 millones de desempleados” y estimó que era “tiempo que otra persona venga y solucione el problema”.

Los demócratas cuestionaron duro en las redes sociales la puesta en escena del actor y le recordaron que esa silla (a la que hablaba) “está ocupada”. Según la campaña de Romney, “juzgar a un ícono estadounidense como Clint Eastwood a través de una óptica eminentemente política no funciona”, dijo una portavoz al sostener que se trató de un momento distendido de la ceremonia “que el público disfrutó”.

Pero más allá de la polémica, luego, Romney apuntó a uno de los temas más candentes: la desocupación. ”Lo que necesita Estados Unidos son trabajos, un montón de trabajos”, dijo Romney y prometió 12 millones de nuevos empleos si gana.

El millonario ex gobernador de Massachussetts, de 65 años, recibió así la investidura oficial de su partido ante miles de militantes, lo que marcó el inicio de la campaña presidencial y un reto para Obama, que la próxima semana, entre el 4 y 6 de septiembre, protagonizará la Convención  Nacional del Partido Demócrata en Charlotte, Carolina del Norte.

Romney fue presentado por el senador cubano-estadounidense de Florida, Marco Rubio, quien recordó su pasado en el seno de una familia de inmigrantes cubanos, para conectar con el público en el discurso político con mayor proyección nacional en su carrera.

La ceremonia cerró con el clan Romney casi en pleno junto al candidato a la vicepresidencia Paul Ryan, su esposa y sus tres hijos, en el escenario saludando a la multitud, mientras llovían globos y papelitos con los colores de la bandera estadounidense.

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