Subió al taxi, indicó una dirección y al llegar en vez de pagar amenazó al chofer con una sevillana, le robó plata y el celular y escapó en el mismo vehículo de alquiler. No fue lejos. El taxista había alcanzado a encender las luces de pánico de la unidad, la Policía lo detectó y detuvo al asaltante al cabo de una persecución que terminó con el auto chocado contra un cordón.
Daniel G., de 34 años, paró el taxi en Provincias Unidas y Viamonte. Le indicó al chofer, Pedro M., que lo llevara hasta Cochabamba y Solís. Al llegar a esa dirección, en lugar de la billetera para abonar el viaje sacó una navaja tipo sevillana, amenazó al conductor y le exigió la entrega de la recaudación y su teléfono móvil. No huyó a pie: se llevó el auto de alquiler dejando al chofer en la calle. No se dio cuenta de que el trabajador había encendido las luces de pánico. Hubo un llamado al 911 y un móvil policial detectó el Toyota Etios con la señal luminosa de alarma en Garzón y Presidente Perón. Hubo una persecución hasta que, en Pellegrini y Cullen, el taxi robado mordió el cordón y se detuvo. Allí apresaron al ladrón, que llevaba consigo la navaja, un celular , los 1.400 pesos robados al chofer y la documentación del mismo.
