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Quedó preso en un hospital por el crimen del gendarme retirado

Tiene 36 años y entró al Sáenz Peña con un tiro en la pierna, lo que se corresponde con la herida que el custodio le causó a su asesino. Mataron a gendarme retirado que intentó frustrar un asalto


Anteayer, alrededor de las 17, el gendarme retirado de 65 años Ubaldo Miranda moría luego de recibir un balazo en el pecho. Fue durante un intercambio de disparos con dos motociclistas que intentaron asaltar un bazar de barrio Alvear, según la principal hipótesis. Una hora más tarde, ingresaba en el hospital Roque Sáenz Peña un hombre de 36 años con un plomo en el cuerpo que quedó detenido. Es que la herida que presentaba coincidía con la que había sufrido uno de los sospechosos de atacar al gendarme. Además, la ropa que vestía coincidía con la descripción que habían aportado los testigos sobre uno de los atacantes. De ser dado de alta, hoy será sometido a una audiencia imputativa en los Tribunales provinciales.

Según voceros del caso, el sospechoso, que al cierre de edición se encontraba internado en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), fue identificado como Roberto Martín O., de 36 años, quien quedó con custodia policial en la tarde del lunes, poco después de que el gendarme retirado fuera asesinado.

La víctima, Ubaldo Miranda, de 65 años, falleció poco después de las 17 de anteayer, luego de ser baleado en el pecho en la puerta de un bazar de Cafferata y Biedma y después de esperar una ambulancia que se demoró hasta su muerte. Tras el hecho, fueron varios los testigos que dijeron a los investigadores que uno de los dos motociclistas que habían llegado hasta ese lugar con intenciones de robo había recibido un tiro en la pierna.

Fue a las 18.05 cuando Roberto Martín O. llegaba al hospital Roque Sáenz Peña con una herida de arma de fuego en la ingle. Los investigadores tomaron conocimiento del hecho y, a pesar de que el hombre dijo que lo habían baleado cuando un ladrón intentó robarle, quedó internado con custodia policial.

Ayer, el fiscal de Homicidios Dolosos en turno, Pablo Pinto, estaba a la espera de que el sospechoso –que más tarde fue trasladado al Heca– fuera dado de alta para ser sometido a una audiencia imputativa que, según se preveía, se iba a realizar hoy en los Tribunales provinciales.

Los voceros explicaron que la ropa que vestía el sospechoso cuando ingresó al hospital coincidía con la que habían descrito los testigos del hecho y que quedó registrada por una cámara de seguridad. Además, durante un allanamiento en la casa del padre del herido se secuestró un casco de moto de características similares al que llevaba puesto uno de los atacantes.

Fuentes tribunalicias deslizaron que el sospechoso cuenta con una docena de antecedentes penales, en su mayoría por delitos contra la propiedad.

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