Edición Impresa

Clima espeso

Putin se indignó con Turquía: “Es cómplice del terrorismo”

El jefe ruso acusó de “traición” a Ankara que le derribó avión militar en la frontera siria. Obama respaldó a Erdogan.


El presidente ruso, Vladímir Putin, acusó a Turquía de complicidad con el terrorismo islámico por derribar ayer un avión bombardero en territorio sirio y lo definió como “una puñalada por la espalda”. En tanto, el primer ministro turco Ahmet Davutoglu y el presidente Recep Tayyip Erdogan justificaron la acción en defensa de su frontera. Estas palabras fueron apoyadas por el presidente estadounidense Barack Hussein Obama, para quien Turquía tiene el derecho “como cualquier otro país de defender su territorio y su espacio aéreo”.

“La pérdida de hoy está vinculada con un golpe que nos han dado a traición cómplices del terrorismo”, afirmó Putin luego de anoticiarse del hecho mientras mantenía una reunión con el rey Abdalá II de Jordania en Sochi, mar Negro.

Putin destacó que el avión caza Su-24 “estaba en el aire cuando fue atacado a una altitud de 6.000 metros y a una distancia de un kilómetro de la frontera con Turquía”.

“Nuestro avión fue derribado en territorio sirio por un cohete aire-aire disparado por un caza turco F-16”, subrayó y precisó que “cayó a cuatro kilómetros de la frontera con Turquía”.

Resaltó que los aviones rusos sobrevolaban una zona montañosa del norte de la provincia de Latakia y advirtió de que “este trágico acontecimiento tendrá graves consecuencias para las relaciones ruso-turcas” y criticó a Ankara porque, en vez de entablar contacto con Moscú, “la parte turca se dirigió a sus socios de la Otán para abordar este incidente”.

“Como si nosotros hubiéramos derribado un avión turco y no ellos uno nuestro”, dijo Putin y se preguntó: “¿Quieren poner a la Otán (Organización del Tratado del Atlántico Norte) al servicio del Estado Islámico?”.

El jefe del Kremlin aseguró: “Nunca permitiremos que se cometan crímenes como el de hoy (por el de ayer)”.

Recordó que Turquía forma parte de la coalición antiterrorista encabezada por EE.UU., país con el que Rusia ha suscrito un acuerdo “sobre la prevención de incidentes aéreos”.

Putin subrayó que “hace tiempo” que ha “constatado el hecho de que hacia Turquía se dirige una gran cantidad de petróleo y derivados del crudo de los territorios ocupados en Siria”.

La defensa turca

Turquía, cuyo agregado militar en Moscú fue citado ayer por la Cancillería rusa, sostuvo que el siniestrado avión ruso se encontraba en su espacio aéreo y sólo decidió derribarlo tras más de una decena de advertencias que sus pilotos ignoraron.

El incidente ocurrió al noroeste del territorio sirio, al norte de Latakia, escenario desde hace varios días de violentos combates entre el ejército fiel el presidente Bashar Al Assad, apoyado por la aviación rusa, y los rebeldes. En la misma región de Siria operan –además de los yihadistas del Estado Islámico (EI)– varios otros grupos insurgentes, entre ellos la rama siria de la red Al Qaeda, el Frente Al Nusra.

Las cadenas de televisión turcas mostraron imágenes del avión ruso ardiendo durante el vuelo y luego su caída en las montañas cercanas a la frontera turca, frente a la provincia de Hatay, sur de Turquía.

“Fue derribado de acuerdo con las reglas de combate después de haber violado el espacio aéreo turco, pese a las advertencias”, informaron fuentes de la presidencia turca.

El Estado mayor turco sostuvo que el cazabombardero ruso fue advertido “diez veces en el espacio de cinco minutos”.

Ankara y Moscú están enfrentados en el conflicto sirio, que ha dejado más de 250.000 muertos desde 2011. Rusia, con Irán, constituye el último apoyo al régimen de Assad. En cambio el islamo-conservador Erdogan exige que el presidente sirio deje el poder.

El ministro ruso de Exteriores Serguei Lavrov, quien tenía prevista una visita el mañana a Ankara, para entrevistarse con responsables turcos, la anuló ante “la creciente amenaza terrorista” en Turquía.

Distintas versiones sobre la suerte de los pilotos

Uno de los dos pilotos del caza ruso derribado murió por disparos de los rebeldes cuando llegó a tierra tras eyectarse del avión, y el otro está desaparecido, según fuentes rebeldes y de la oposición siria. Posteriormente, un responsable turco, que pidió el anonimato,  afirmó en Ankara que “Turquía dispone de informaciones según las  cuales los dos pilotos están vivos e intenta recuperarlos”. Varios videos, no autentificados, mostraron el cadáver de un hombre con uniforme, supuestamente el piloto, rodeado de rebeldes. Según Ankara, el aparato violó el espacio aéreo turco. Rusia admitió el derribo, pero aseguró que el aparato, un cazabombardero  de tipo Sukhoi Su-24, volaba dentro del espacio aéreo sirio.

Entre duros cruces y llamado de los líderes a la prudencia

El primer ministro turco Ahmet Davutoglu justificó la decisión de derribar al avión ruso por el “deber” de defender las fronteras  y el presidente Recep Tayyip Erdogan señaló que todos “deben respetar el derecho de Turquía ”, lo que el presidente estadounidense Barack Hussein Obama respaldó. En tanto, el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, pidió que se tomen “medidas urgentes para calmar las tensiones” y pidió una “investigación creíble y completa” del incidente, según su portavoz, Stephane Dujarric.

De visita en Washington, el presidente francés François Hollande manifestó su deseo de “evitar cualquier escalada” tras este incidente.

El secretario general de la Otán, Jens Stoltenberg, llamó a “la calma y la desescalada”, tras reunión extraordinaria de los 28 países miembros de la alianza atlántica en Bruselas.

El Ministerio de Relaciones Exteriores británico calificó de “incidente muy grave” si bien puntualizó que “no sería prudente comentar más hasta tener más certeza sobre los hechos”.

Comentarios