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Homicidio en Baigorria

Procesado por matar a quien le espantaba clientes del búnker

Según el fallo, Serrucho cobraba peaje a quienes iban a comprar droga, por lo cual Zorro decidió atacarlo.


El Zorro tiene 38 años y el mes pasado fue procesado por el Juzgado de Instrucción 2ª, a cargo de Alejandra Rodenas, bajo acusación de matar a un vecino de un balazo en el pecho. El hecho se produjo en enero, en la localidad de Granadero Baigorria cuando Serrucho, como se conocía a la víctima, se encontraba en la puerta de su humilde vivienda con su hermano y dos amigos. Hasta el lugar llegó el acusado y le propinó varios culatazos en la cabeza para luego balearlo, reza el fallo. La víctima intentó protegerse y se escondió debajo de su cama, donde fue hallado sin vida por su hermano, quien afirmó que existía entre ambos una bronca de vieja data porque Serrucho cobraba peaje a la gente que compraba drogas en el búnker de Zorro.

Gerardo Donnie, conocido como Serrucho, vivía junto a su mujer y sus dos hijos en una vivienda ubicada en Newbery al 1300 de Granadero Baigorria. Cerca de las 19 del 10 de enero se encontraba en la puerta de su casa con su hermano y dos amigos tomando vino cuando se presentó Daniel Ignacio D., alias Catrasca o Zorro. Según el relato de Germán –hermano de la víctima–, el acusado se acercó al grupo, sacó un arma calibre 32 largo de entre sus ropas y le pegó entre 3 y 4 culatazos a Serrucho en la cabeza. El grupo se levantó y el agresor trastabilló, se cayó y empezó a los tiros por lo que todos salieron corriendo, expresa la resolución.

Un cuerpo bajo la cama

Germán sostuvo que perdió de vista a su hermano, por lo que regresó a buscarlo y no lo encontró. En un segundo intento observó bajo la cama matrimonial de Serrucho que asomaban unos pies. Cuando levantó la sábana, halló a su hermano sin vida en medio de un charco de sangre. Serrucho recibió un disparo a la altura de una tetilla lo que le generó una hemorragia cardiopulmonar masiva que lo llevó a la muerte. Según la versión familiar, la víctima y el victimario se tenían bronca; incluso su hermano relató durante la instrucción que esa diferencia se generó porque Gerardo cobraba peaje a quienes compraban drogas en el búnker ubicado a un par de cuadras, donde trabajaba Zorro, refiere el fallo.

Rodenas evaluó las pruebas reunidas y tomó en cuenta el relato de Germán, a lo que sumó los dichos de otro de los testigos presenciales. Evaluó el intento de fuga del acusado al momento de su detención y el reconocimiento positivo en rueda de personas para concluir que en esta etapa del proceso hay elementos suficientes para enviar a juicio a Daniel Ignacio D. como probable autor del delito de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en perjuicio de Gerardo Donnie.

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