El gobierno nacional dispuso una recompensa de 500.000 pesos para quienes brinden datos que ayuden a dar con el paradero de Natalia Acosta, desaparecida hace poco más de siete años en la provincia de Santa Fe. La joven tenía 21 años, ejercía la prostitución en el microcentro de la capital provincial y su familia sospecha que fue víctima de trata de personas.
Acosta fue vista por última vez el 29 de mayo de 2009, luego de ausentarse de su casa en el barrio Centenario, de la localidad de Santo Tomé. Desde entonces nada más se supo de ella.
Con el fin de obtener información que ayude a dar con su paradero, el Ministerio de Seguridad de la Nación, mediante una resolución publicada en el Boletín Oficial y firmada por Patricia Bullrich, ofrecerá una recompensa de $500.000 “destinada a aquellas personas quienes, sin haber intervenido en el hecho delictual, brinden datos útiles sobre el caso”.
Las personas que quieran suministrar datos, deberán comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de Personas Ordenada por la Justicia al 0800-555-5065.
Hace siete años que la familia de Natalia insiste en que la joven fue víctima de una red de trata y durante todo este tiempo fueron ellos los que hicieron alguna investigación y fueron presentando sin suerte las pruebas sistemáticamente al Juzgado de Instrucción 5ª, a cargo del magistrado Darío Sánchez.
Natalia se prostituía en la esquina de 25 de Mayo y Suipacha y la noche en que desapareció estuvo en el cabaret Místico, ubicado muy cerca, en pleno microcentro de la ciudad de Santa Fe.
La pareja de la joven de 21 años era Eduardo Daniel Ruiz, sindicado como su proxeneta. Ese 29 de mayo, Ruiz le había pedido que a las 3 de mañana volviera a la casa que compartían en Santo Tomé. Sin embargo, la muchacha nunca volvió a ser vista.
A principios de noviembre, luego de un dictamen favorable de la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, la Corte Suprema de Justicia de la Nación aceptó que el caso que investiga la desaparición de Natalia Acosta pase al fuero federal. Así el delito pasó a ser investigado bajo su competencia, dejando de lado la intervención de la Justicia de la provincia de Santa Fe, que había caratulado el caso como averiguación de paradero, según explicó el defensor Gabriel Ganón en la conferencia de prensa que brindaron junto a los padres de la joven.
Además, en la presentación se hizo pública la solicitada al Estado argentino del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de las Naciones Unidas, instando a que se extremen las medidas investigativas para poder determinar el paradero de Natalia Acosta. Naciones Unidas solicitó también que se investigue y se sancione a los eventuales responsables de su desaparición forzada.
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