El Tribunal Oral Federal de Santa Fe condenó a ocho años de prisión a Cecilia Góngora y a seis años a la médica obstetra Elsa Nasatsky por la apropiación y supresión de la identidad, en 1977, del nieto número 120 recuperado por Abuelas de Plaza de Mayo: José Luis Maulín Pratto, de Reconquista.
Ayer al mediodía el presidente del tribunal José María Escobar Cello leyó la sentencia, que era aguardada con mucha expectativa por familiares de Maulín Pratto y militantes de las agrupaciones Hijos, Norte Amplio por los Derechos Humanos y gremios, entre otras organizaciones, en las puertas del Tribunal Federal de la capital santafesina.
El fallo señala a Cecilia Góngora como autora penalmente responsable de los delitos de retención del menor sustraído a su madre, falsedad ideológica de documento público y alteración de estado civil del recién nacido, que fue inscripto bajo la identidad falsa de José Luis Segretín.
Góngora, la apropiadora, fue sentenciada a ocho años de prisión, mientras que Elsa Nasatsky, la obstetra que intervino en el parto controlado por represores de la Fuerza Aérea, recibió una condena de seis años como autora y partícipe necesaria de los delitos de falsedad ideológica de documento público y alteración de estado civil de José Maulín Pratto. La médica fue absuelta de los delitos de retención y ocultamiento de la víctima, por los que también había sido acusada en este proceso.
El tercer imputado en la causa falleció dos años antes de la sentencia: el entonces jefe de Inteligencia de la Brigada Aérea de Reconquista, Danilo Sambuelli, quien ya había sido condenado a 21 años de prisión en otro juicio por delitos de lesa humanidad.
El subsecretario de Derechos Humanos de la provincia, Ramón Verón, destacó la sentencia del Tribunal Oral Federal de Santa Fe: “Santa Fe demuestra paso a paso que continúa con los procesos judiciales a los responsables de delitos de lesa humanidad. Esta sentencia sigue marcando el camino con las políticas de memoria, verdad y justicia. De todas formas, es necesario realizar una observación un poco más amplia que la sentencia en sí, porque sentar a los responsables y cómplices del terrorismo de Estado en el banquillo de los acusados es un hecho histórico en todo el país”.
La Causa Góngora se desprende de la Causa Sambuelli, iniciada el 19 de noviembre de 2012 en el Tribunal Oral Federal de la ciudad de Santa Fe, que investigó crímenes de lesa humanidad perpetrados en el norte santafesino durante el terrorismo de Estado. El fallo de esa causa se dio a conocer el 6 de agosto de 2013, con condenas para los siete imputados, incluido el brigadier Sambuelli, quien murió en 2014.
La investigación se había iniciado en noviembre del 2008 a partir de las testimoniales de Griselda Pratto y Luisa Beatriz Pratto (madre biológica del niño) en el Juzgado Federal de Reconquista, en el marco de la causa Sambuelli.
Actuó como querellante Rubén Maulín, padre biológico del niño, quien fue asistido legalmente por José Adrián Zaragoza, Lucila Puyol y Guillermo Munné.
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