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Escruche

Mucho trabajo para un magro botín

Ingresaron a una financiera por un boquete pero sólo se alzaron con $25 mil.


“Ahora hasta 45.000 en el acto”. El tentador anuncio, pintado en fluorescente sobre la vidriera de una financiera céntrica, no sólo seduce a posibles clientes necesitados de dinero. También despertó la atención de ladrones que este fin de semana concretaron un plan perfecto. Accedieron al lugar por medio de un boquete, sin toparse con empleados, ni policías, ni dejar rastros en las cámaras de seguridad. Lo único que falló fue el botín, que no alcanzó a cubrir ni la mitad de lo que prometía el cartel de la vidriera.

Ayer a las 8, cuando los empleados de Credil SRL, la financiera ubicada en Rioja 1081, abrieron sus puertas se encontraron con un boquete de medio metro de diámetro dentro de una de las oficinas del fondo que no tiene acceso al público. La salida del boquete estaba a sólo centímetros de una pared que linda con un pasillo, ubicado en Rioja 1087, que da acceso a una planta alta que se encuentra deshabitada, en tanto en la planta baja funciona un bar.

“Sólo se llevaron cambio”, dijo ayer uno de los empleados a El Ciudadano quien refirió que esa sucursal hacer, ocho años que funciona en el microcentro y nunca les ocurrió algo similar. “No sabemos cuándo entraron, cerramos el viernes a la tarde y nos encontramos con esto hoy a la mañana”, aclaró ayer el joven mientras efectivos de la PDI buscaban rastros entre los escombros.

Lo mismo refirieron desde el bar ubicado casi al lado de la financiera: “Cerramos el sábado y hoy nos enteramos porque vino la Policía a preguntar. Pero no sabemos nada. La planta alta está abandonada”.

Uno de los investigadores sostuvo que el botín con el que se alzaron los ladrones rondaba los 25 mil pesos. “No sabemos qué herramientas utilizaron. No dejaron rastros en el lugar. La alarma no se activó, en principio porque no estaba programada para ese sector, al igualo que las cámaras de vigilancia, cuya mira estaba centrada en la entrada”, dijo otro pesquisa que agregó: “Entendemos que los ladrones conocían las instalaciones del lugar, pero podría ser cualquiera, hasta un cliente”.

El robo ocurrió en jurisdicción de la seccional 2º y es investigado por la fiscalía de Flagrancia en turno.

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