En un golpe comando, anoche un grupo de seis ladrones copó la comisaría y asaltó una mutual de la pequeña localidad de Montes de Oca, ubicada a 127 kilómetros de Rosario. Los asaltantes redujeron a dos uniformados, tomaron a uno de ellos de rehén y asaltaron una mutual, alzándose con un botín que aún no fue precisado por los investigadores.
El golpe, según declaró el presidente comunal del pueblo, Leandro Dietschi, se realizó con un alto grado de profesionalismo cuando un llamado a la seccional alertaba sobre la presencia de un auto sospechoso en la ruta. Casi al mismo tiempo, los seis asaltantes entraron a la dependencia policial, redujeron a los dos uniformados y salieron con uno de ellos.
Desde allí fueron a la mutual del club Sportivo Athletic de Montes de Oca: “Ese era su objetivo”, dijo el jefe comunal local.
“Maniataron al conserje, lo ataron y después hicieron llamar al gerente con la misma policía. Cuando llegó, del mismo patrullero salió gente encapuchada y de otro auto gente con armas. Entraron y violentaron todo”, relató. Y aseguró que “el pueblo fue entregado por alguien para que lo saquearan”.
Tras el golpe a la comisaría, los ladrones “tuvieron tres horas para trabajar, para lograr su cometido”, dijo el intendente, e insistió: “El pueblo fue entregado. Te sentís indefenso. Tomaron a la propia policía que es el elemento de protección. Es una sensación muy fea”. Dietschi contó que el efectivo que había sido tomado como rehén fue liberado en Cañada de Gómez, mientras que el conserje de la mutual debió ser atendido en hospital por lesiones.
La misma mutual ya había sido asaltada en noviembre de 2015, cuando un grupo de ladrones se robó unos 30 mil pesos. Este último se suma a una serie de asaltos en localidades pequeñas de la provincia que operan bajo la misma modalidad delictiva.
“También robaron en una cerealera a la que entraron usando un soplete -recordó Dietschi-. No quiero decir que es la misma gente pero usan el mismo sistema: vienen los días de lluvia para que no haya movimiento en el pueblo y van a lugares donde saben que hay dinero”, manifestó.
En marzo pasado fue el turno de Bernardo de Irigoyen, otra pequeña localidad santafesina ubicada a 97 kilómetros de Rosario, donde un grupo integrado también por seis ladrones tomó la comisaría, la comuna, el correo y el banco, de donde se llevaron un total de 260 mil pesos. Tras el hecho, uno de los ladrones fue abatido por la policía tras una persecución policial. En tanto, en junio dos miembros de esta banda fueron detenidos en Buenos Aires.
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