La mujer que perdió a su bebé al ser baleada durante el ataque perpetrado en el distrito bonaerense Hurlingham en el que otros cinco parientes murieron mejoraba en su estado de salud y el pronóstico era “alentador”.
Así lo indicó el médico del Hospital Posadas, de Haedo, Jorge Palmieri, en torno al estado de Mónica Lloret, la mujer de 36 años, que el domingo por la noche recibió tres de los disparos realizado por Diego Loscalzo, uno de los cuales le impactó en el pecho y otro en el abdomen, matando a su bebé Mateo, que iba a nacer este lunes.
Mientras el estado de Mónica continuaba reservado, la hija de Mónica, una niña de 12 años que recibió disparos en sus piernas, se encontraba “en buen estado general” y “evoluciona favorablemente”.
Tanto la mujer como su hija se encuentran con asistencia psicológica por el traumático episodio que les tocó vivir.
En cuanto a Lloret, Palmieri informó que fue operada por tres equipos quirúrgicos distintos: uno de ellos de tórax, otro de obstetricia y un tercero de cirugía general, es es el que atendió un compromiso en el intestino.
El médico señaló que este lunes se le quitó el respirador artificial y que desde la tarde de esa jornada permanecía “lúcida” y hemodinámicamente compensada.
Por el momento, indicó Pamieri, sólo se le informó sobre la pérdida del bebé y no que entre las víctimas fatales de la masacre se encontraba su esposo, José Maguna.
En tanto, el autor de los asesinatos, que fue atrapado en el mediodía de ayer, cuando viajaba en un micro a la altura de Río Segundo, comenzó a ser trasladado desde la Cárcel de Bouwer, cerca de la capital de esa provincia, al Gran Buenos Aires, para ser puesto a disposición de la Justicia de Morón.
La serie de crímenes se produjo el domingo por la noche cuando Loscalzo, de 38 años, asesinó a tiros en una vivienda de la zona de William Morris a su pareja, la policía Romina Maguna, e hizo lo propio con la hermana de la mujer, Vanesa, y el esposo, Dario Diaz.
El asesino se dirigió con su moto posteriormente a otra casa de la localidad de Villa Tesei, a unas 20 cuadras, y mató a tiros a su cuñado José Maguna, a la madre, Juana Paiva, e hirió a Lloret y a la hija de la pareja.
Posteriormente, Loscalzo abandonó su moto en el barrio porteño de Lugano y el lunes al mediodía fue detenido en la provincia de Córdoba, a unos 700 kilómetros del lugar en el que había cometido la masacre.
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