Policiales

Fontana al 3100

Le meten 32 tiros, muchos en la cabeza, y la sospecha es que los atacantes pueden ser policías

El fiscal Patricio Saldutti, que investiga el crimen de Julián Zanier, calcula que hay más de 60 vainas servidas. Hirieron de 6 balazos al cuñado de la víctima y mataron a un perro con 7 plomos Convocan a Asuntos Internos, ya que según testigos los atacantes eran policías y no estaban disfrazados


Los homicidios se acumulan en la ciudad, 173 en lo que va del año y las víctimas siguen siendo los pibes de los barrios. Pero el cometido este jueves por la madrugada tiene algunas particularidades. Julián Manuel Zanier, de 23 años, huyó de Villa Banana, de donde era oriundo, y se refugió en la zona norte donde pasadas las 5 fue acribillado a balazos en una casa de Fontana al 3100, casi esquina con Gazcón al 2400, de barrio Nuevo Alberdi. Estaba en silla de ruedas producto de un ataque a balazos anterior, de hace cinco años, cuando salvó su vida de milagro.

De acuerdo con fuentes policiales y judiciales, este jueves cinco hombres con ropas policiales entraron por un pasillo de tierra, ubicado en Fontana al 3100. Gritaron: “Policía, al piso”. Y con una maza rompieron la puerta de la precaria vivienda donde dormían Zanier, su pareja de 22 años, la pequeña hija de ambos de 4, y su cuñado, Agustín A., de 18 años. A Zanier, que estaba en silla de ruedas, unos 32 plomos le impactaron en el cuerpo, muchos en la cabeza. A su cuñado, 6. Si bien el joven no murió, está internado grave en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).

El fiscal Patricio Saldutti, que investiga el crimen, indicó había unas 69 vainas servidas calibre 9 milímetros esparcidas en el lugar y dentro de la casa hallaron una pistola calibre .380 con el cargador lleno y municiones.

Al cierre de esta edición, los detectives aportaron que no habían hallado rastros de vainas servidas de este último calibre y que tampoco sabían si estaba en la vivienda o pertenecía a los homicidas.

También, Saldutti convocó al personal de la Agencia de Control Policial (ex Asuntos Internos), ya que según testigos los atacantes eran policías; insistieron en que no estaban disfrazados.

Los vecinos aseguraron que la víctima vivía allí hace poco tiempo, pero que nunca salía y que estaba en silla de ruedas. De quién se ocultaba, no es claro. Quizás de la Policía, pero lo cierto es que en esa precaria casa hay un garaje de donde hace dos días sacaron una cupé Volkswagen Scirocco, valuada en varios millones de pesos, siempre de acuerdo a trascendidos.

Testigos indicaron que los agresores llegaron y escaparon en un Peugeot 206 color azul y que ese mismo vehículo fue visto merodeando días atrás por la zona.

Según voceros policiales, la víctima fatal tenía un pedido de captura por el crimen de Dora Quiroga, asesinada a principios de febrero del 2020 en la zona sudoeste, donde quedó en medio de un tiroteo. La mujer de 63 años recibió un balazo en la espalda cuando desde un auto corrían a los tiros a los ocupantes de una moto. En esta causa hay detenidos y condenados, aunque el fiscal Saldutti dijo que investigará esa situación.

También lo vincularon con el homicidio de Brian Yedro, un joven de 29 años asesinado en Cochabamba y Constitución, en marzo de este año. Era el hijo del titular del Sindicato de Cadetes de Rosario, quien trabajaba realizando delivery en una moto Honda Wave para un comercio de la zona. Sin embargo no pesaba captura sobre Zanier por ese hecho.

 

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