Los uruguayos de La Vela Puerca desembarcan esta noche en Rosario para cumplir con un ritual: está vez festejar sus dos décadas de recorrido junto al público local. El encuentro será a las 21, en el Humberto de Nito (Parque Urquiza), y en el marco de una serie de shows que los mantendrá girando y festejando por diversos países.
Se trata de la gira por el vigésimo aniversario, “donde cada recital será una celebración con los mejores temas del repertorio puerco”, adelanta, a través de un parte de prensa, la banda integrada por Sebastián Teysera y Sebastián Cebreiro en voz, Nicolás Lieutier en bajo, Carlos Quijano en saxo, Alejandro Piccone en trompeta, Santiago Butler y Rafael Di Bello en guitarras, y José Canedo en batería.
“Es la primera vez que vamos a hacer el show de los 20 años con toda la escenografía, con todo. Ni siquiera nosotros lo vimos”, adelantó a El Ciudadano Sebastián “Enano” Teysera, que agregó: “Es un viaje hacia el pasado, son bloques y cada bloque tiene 5 o 6 canciones que representan un disco. Empezamos con Érase…, luego nos vamos para Piel y hueso, después para El Impulso, A Contraluz, De Bichos y Flores y terminamos con el primer disco, Deskarado”.
Respecto del armado del show y la elección de temas, Teysera analizó: “Fue una tertulia larga porque al principio todo el mundo eligió los temas que le parecían imprescindibles. Llegaron listas de 47 temas. Finalmente, nos pusimos de acuerdo. Y llegar a desempolvar las canciones del primer disco y ensayarlas fue un reto. Uno tiene el miedito de ver si puede hacerse cargo de las canciones de esa época. Por suerte no pasó eso. Lo que sí pasó fue que las canciones del primer disco tienen una velocidad a la que, a esta altura de la vida, nos costó llegar. Y bajar de tono es algo que tenés que asumir, ya la voz no es la misma de los 20 y te da un poco de rabia (risas)”.
Finalmente, el músico habló de la actualidad de La Vela: “Estamos celebrando 20 impensables años. Creo que la inocencia y la inconciencia que tenía la banda en su momento, esta vez, nos jugó a favor porque si hubiéramos pensado en el 95: «Qué bueno sería cumplir 20 años», no lo hubiéramos logrado. Ese día a día, año tras año, disco tras disco fue la clave fundamental para estar ahora cumpliendo 20”.
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