Ever Banega sabe que en Valencia no tendrá lugar. Así se lo comunicó el entrenador portugués Nuno Espirito Santo, quien no lo llevó a Chile para jugar el partido ante Universidad Católica para jugar la Copa Euroamericana. Y por eso ahora está forzando su salida del club español quedándose con el pase en su poder para intentar un nuevo regreso al Parque de la Independencia.
Banega tiene un año más de contrato pero ninguna de las ofertas que han llegado a las oficinas de Valencia cumple las expectativas de la directiva y mucho menos del jugador.
Así, sin lugar en el plantel, ambas partes pretenden una salida, pero mientras el club quiere recuperar algo de la inversión que hizo en su momento y ni siquiera contempla la posibilidad de cederlo a préstamo, el jugador pretende conseguir la libertad de acción, siguiendo el camino del defensor portugués Ricardo Costa. Y de no lograrlo, estaría dispuesto a quedarse a cumplir su contrato aunque no vaya a jugar.
Obviamente, esa situación no favorecerá a ninguno: Banega no tendrá rodaje y se desvalorizará aún más, y Valencia deberá pagarle el contrato a un jugador que no es tenido en cuenta por el cuerpo técnico.
Por eso, el jugador tiene previsto hacer el intento en las próximas horas de convencer a la dirigencia valencianista que lo mejor es rescindir el contrato y que se quede con el pase en su poder. De esta manera, Banega podría arribar sin inconvenientes a Newell’s tal cual es su deseo, según cuentan allegados al volante.
En Newell’s están al tanto de la situación, pero económicamente no pueden hacer ningún esfuerzo luego de la compra de Ignacio Scocco. Por eso, aguardan por lo que Banega pueda negociar por su cuenta en España.
Consultado sobre el tema, Maximiliano Rodríguez eligió anteayer la cautela: “Hablé con él estos días. Tenemos que dejarlo decidir tranquilo. Ya hizo algo importante por Newell’s, ahora tiene que pensar en lo que quiere hacer. Si decide seguir en Europa, está bien; si quiere volver a Newell’s, bienvenido sea. Pero no tenemos que presionarlo. Ya lo convencimos en su momento, ahora tenemos que dejarlo pensar y resolver”.
“Una linda chance”
Claudio Corvalán, quien en las próximas horas se convertirá en el cuarto refuerzo rojinegro, se mostró “muy feliz de jugar en Newell’s”, al que llegará a préstamo sin cargo por 18 meses desde Racing con una opción de compra cercana a los 600 mil dólares. El jugador superó ayer la revisión médica pero aún no firmó el contrato, algo que podría resolverse hoy por la mañana. De ser así, rápidamente se acoplará a los entrenamientos en Bella Vista.
“Estoy muy contento de llegar a Newell’s porque es un club grande, es una linda oportunidad y espero cumplir con las expectativas. Estoy muy ilusionado y con muchas ganas. Voy a dar todo por Newell’s”, manifestó el lateral izquierdo.
Y agregó: “Soy consciente que vengo a un equipo donde trata bien la pelota. Mi fuerte es defensivo, pero sé que en Newell’s hay que pasar al ataque y me gusta, siempre y cuando la jugada lo permita”.
Desde lo físico, Corvalán aseguró estar “diez puntos” porque hizo toda la pretemporada en Racing y adelantó que si Gustavo Raggio lo necesita está “para jugar”.
Raggio probó otro sistema
Gustavo Raggio adelantó apenas entró en funciones que no iba a atarse a un sistema táctico. Y ayer dejó en claro que así será. En la práctica de fútbol a puerta cerrada que tuvo lugar en el estadio Marcelo Bielsa, el DT implementó un cambio en el sistema, pasando del tradicional 4-3-3 a un 4-2-3-1. Pero eso no es todo: en la mente del cuerpo técnico está la idea de un 4-2-2-2 para algunos partidos.
Del entrenamiento de ayer no formaron parte Maximiliano Rodríguez (asistió al velatorio de Julio Humberto Grondona), Víctor Figueroa (arrastra una lesión en el sóleo izquierdo) y tampoco Ignacio Scocco, quien aprovechó la sesión para trabajar en lo físico. En cambio, Marcos Cáceres lució recuperado de una lumbalgia y trabajó a la par de sus compañeros.
Respecto al equipo que arrancó ante Talleres en Rafaela, Raggio incluyó a Oscar Ustari por Lucas Hoyos, Marcos Cáceres por Milton Casco (Cristian Díaz pasó a la izquierda), Leandro Fernández por Guillermo Ortiz y Diego Mateo por Maximiliano Rodríguez. Pero lo novedoso no fueron los cambios nominales sino las disposiciones tácticas.
En primer lugar, el entrenador volvió a jugar con dos volantes de contención como hace mucho tiempo Newell’s no lo hacía. Es que desde la época de Gerardo Martino hasta el último torneo el dibujo táctico siempre fue un 4-3-3. Delante del tándem Villalba-Mateo apareció Lucas Bernardi y a los costados lo hicieron Nicolás Castro y Martín Tonso. Adelante, el único delantero fue Ezequiel Ponce.
El equipo titular, que enfrentó a un combinado de juveniles en el Parque de la Independencia, alistó a Oscar Ustari; Marcos Cáceres, Leandro Fernández, Víctor López, Cristian Díaz; Diego Mateo, Hernán Villalba; Nicolás Castro, Lucas Bernardi, Martín Tonso; Ezequiel Ponce.
Pero hay que tener en cuenta que a este equipo le faltaron dos jugadoresque seguramente serán titulares: Maxi Rodríguez y Scocco. En cuanto a nombres, la Fiera y Nacho entrarían por Castro y Tonso. Pero desde lo posicional, la Lepra cambiaría un delantero por un volante para armar un 4-2-2-2.
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