Ciudad

"Negligencia e Inobservación"

“Homicidio culposo” al propietario del Café de la Flor

La fiscal Valeria Piazza atribuyó a Adrián S. responsabilidad en la muerte por electrocución del bajista Adrián Rodríguez.


El propietario del Café de Flor quedó imputado por “homicidio culposo”, por la muerte por electrocución de un joven músico cuando actuaba en el lugar. Así lo determinó la fiscal del caso, Valeria Piazza, en una audiencia judicial realizada en la mañana de ayer. Desde la Fiscalía marcaron que el empresario Adrián S.  se negó a declarar y seguirá en libertad, ya que el delito atribuido permite la posibilidad, al menos hasta que se realice el peritaje correspondiente al sistema y equipos eléctricos del lugar,  previsto para el próximo miércoles 11 de noviembre.

A poco más de 15 días de ocurrido el siniestro en el bar de Mendoza 862, donde falleció Adrián Rodríguez, bajista de Raras Bestias, luego de recibir una descarga eléctrica, continúa la investigación para determinar las causas del trágico accidente. Hasta el momento, la fiscal tomó declaraciones a testigos e integrantes de otras bandas, quienes adujeron problemas de electricidad en el lugar al menos desde el viernes previo al siniestro, con cortes en el suministro de luz.

Según señaló la fiscal, el propietario del bar, Ariel S., se negó a declarar tras la audiencia imputativa por lo que el resultado de las pericias sería fundamental para determinar responsabilidades en el asunto. “Aún no hice una evaluación acerca de la pena con la que voy a acusar porque no están hechos los peritajes. Si correspondiera una condena, sería una pena de ejecución condicional, ya que el imputado no tiene antecedentes previos, y por eso continua en libertad”, explicó la funcionaria.

En la imputación se le atribuye al propietario el “haber causado, por negligencia e inobservación de los reglamentos y deberes a su cargo, la muerte por electrocución de Adrián Rodríguez, producto de desperfectos en el sistema eléctrico, al no estar debidamente conectado el interruptor diferencial en dicho comercio”. Por tal conducta, se lo acusó de “violación del deber de cuidado exigido a un comerciante que brinda un servicio de espectáculos en vivo”, lo que se consideró como “riesgo jurídicamente desaprobado en razón de no haber tenido las condiciones adecuadas al sistema eléctrico del comercio que administra”, delito que encuadra como “homicidio culposo en calidad de autor”.

Mientras tanto, se espera la realización de los peritajes solicitados sobre las instalaciones eléctricas del lugar y los equipos de audio, para lo que se seleccionaron, mediante sorteo, a tres especialistas en higiene y seguridad, electrónica y eléctrico, todos pertenecientes a la Universidad Nacional de Rosario. Los profesionales se constituirán junto con la fiscal en el Café de la Flor para analizar las instalaciones y los equipos de audio, el próximo 11 de noviembre, un mes después de la tragedia. Los equipos del bar, en tanto, eran manejados por un tercero, sobre quien no pesa ninguna imputación hasta el momento.

“El 11 de noviembre nos vamos a constituir con los tres peritos  en el Café de la Flor para hacer las pericias correspondientes y de allí dirigirnos al deposito judicial para trasladar los equipos de audio a un laboratorio especifico de electrónica, donde se peritarán l para sacar conclusiones al respecto”, expresó Piazza en declaraciones a la prensa, y remarcó su pedido de diligencia a los profesionales para avanzar en la investigación.

El siniestro ocurrió en la madrugada del pasado 12 de octubre, cuando Adrián Rodríguez, bajista de la banda Raras Bestias falleció mientras brindaba un show sobre el escenario de Café de la Flor, tras recibir una descarga eléctrica. En una reconstrucción del hecho, la fiscal afirmó que la primera descarga la recibió el guitarrista de la agrupación, quien al caer hacia atrás tomó contacto con Adrián, quien finalmente recibió la descarga fatal. A su vez, el baterista también fue rozado por el cuerpo del guitarrista sin llegar a hacer contacto con la piel, pero el rebote de la descarga eléctrica lo obligó a abalanzarse sobre el público. Según los primeros peritajes, el disyuntor habría sido desconectado al momento del recital.

El imputado, Ariel S., es el propietario y administrador del lugar desde julio de este año, cuando se hizo cargo de la titularidad del bar que anteriormente manejaba Paulo Andrés Galletti, actual dueño del teatro Vorterix, quien hasta el momento no posee cargos ni acusaciones. Según señaló el abogado de Galletti, en declaraciones previas a la prensa, el contrato de compraventa del lugar se acompañó con el cese definitivo de actividades, conservando sólo la habilitación el nombre del ex titular para evitar el cierre del bar al momento de la transacción.

Músicos disconformes con la carátula

Integrantes de la banda y allegados manifestaron su disconformidad con la carátula imputativa de homicidio culposo, ya que implica una baja condena y habilita la libertad condicional del acusado al carecer de antecedentes previos. “Hoy nos desayunamos con esta noticia y no nos cayó bien, que lo hayan acusado de homicidio culposo significa que va tener una condena baja. Seguramente esto va a quedar en la nada, como pasó con otros casos, cuando se trata de gente de poder”, señaló Joel, compañero del bajista Adrián Rodríguez en Raras Bestias.

En el mismo sentido, Federico, uno de los integrantes de Músicos Autoconvocados expresó: “Para nosotros no es homicidio culposo porque el que lo hizo es conciente de que podía generar la muerte de una persona. Ya en la marcha del 20 habíamos pedido que se cambiara la carátula”.

Mientras tanto, la agrupación realizó una asamblea para trazar un balance de las repercusiones de la marcha del pasado 20 de octubre y elaborar las siguientes medidas a tomar para reforzar el pedido de justicia por Adrián, a la par de continuar con el reclamo de “mejoras inmediatas” de las condiciones en las que trabajan los músicos de la ciudad.

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