Edición Impresa

Reflexiones

Euroclear también arregla con buitres y con Griesa

.


Los fondos buitre que vencieron en el “juicio del siglo”, en este caso Aurelius y Olifant, cerraron también un acuerdo con Euroclear para permitirle liquidar la deuda argentina fuera de la jurisdicción de Nueva York. Las negociaciones fueron secretas y en paralelo a las que NML Elliott de Paul Singer concretaba con el Citibank, que la noche del sábado 21 recibió la bendición del juez Thomas Griesa para permitirle los pagos de los vencimientos de mañana. El texto de las negociaciones entre Aurelius y Olifant fue entregado el jueves pasado a última hora al juez de Nueva York y ahora se espera que Griesa dé su aprobación; la que, obviamente, se descarta que se conseguirá, ya que se trata del mismo pedido que antes le fue avalado al Citibank. En consecuencia, y siguiendo la misma reacción que el gobierno de Cristina de Kirchner mantuvo con el banco norteamericano, el Ministerio de Economía de Axel Kicillof tendría que haber rechazado el acuerdo entre Aurelius/Olifant y Euroclear y amenazar al agente de compensación de valores más grande del mundo de intervenirlo para garantizar el pago de la deuda a los tenedores de los títulos públicos argentinos que deben ser liquidados esta semana.

En el fondo, el gobierno argentino no quiere acuerdos privados entre los agentes pagadores contratados por el país y los fondos buitre, y menos si éstos son luego avalados por Griesa, poniendo en riesgo las operaciones de colocación de títulos surgidos de los canjes de 2005 y 2010.

El temor concreto del Ministerio de Economía es que en los acuerdos entre los fondos buitre y el Citibank y, ahora también, Euroclear ambas entidades financieras se liberen de sanciones de Griesa a partir del aval de los pagos por parte de Elliott, Aurelius y compañía; pero que entreguen a cambio los datos de los pagos de la deuda y que éstos luego puedan ser seguidos de cerca por los abogados litigantes para después impedir las transferencias. Con esto, se complicaría aún más el cumplimiento de los pagos por parte de la Argentina y se generarían múltiples juicios cruzados entre los acreedores “performance” (los que tienen que cobrar deuda surgida luego de las dos reestructuraciones del default 2001), la Argentina y el juzgado de Griesa. Se trata de una nueva estrategia de los fondos buitre para “embarrar la cancha”, complicando aún más a la Argentina, para luego forzarla a negociar en malas condiciones.

El escrito presentado por Aurelius y Olifant (entre otros), que confirma el acuerdo entre los fondos buitre y Euroclear, está firmado por el abogado del primero, Edward Friedman, un histórico del “juicio del siglo” y que actúa siempre en tándem con Robert Cohen del Elliott. En el texto presentado a Griesa, y que el juez debe aprobar (o rechazar) en horas, se menciona el acuerdo alcanzado entre las dos partes y el compromiso de Euroclear de informar cualquier pago o bono relacionado con los securities argentinos en litigio, además del compromiso de retenerlos si Griesa lo ordena. Incluso, en el texto, Friedman asegura que Euroclear está obligado a presentarse ante Griesa para recibir “más órdenes, aclaraciones o instrucciones”.

Para la Argentina, la posición de Euroclear es inaceptable, igual que la del Citibank, tanto por haber negociado sin autorización del país con los fondos buitre sobre cómo pagar deuda soberana como por la falta de protección hacia los bonistas que deben recibir el pago de los intereses de los títulos públicos que vencen esta semana. Según la posición del equipo de Axel Kicillof, en ambos casos se estarían violando las leyes argentinas de regulación del sistema financiero local, además de no estar cumpliéndose los compromisos firmados en el momento de hacerse cargo de las operaciones de colocación de deuda local.

Pero también, Kicillof quiere enviar un mensaje al resto de los bancos que puedan llegar a intervenir en el mismo compromiso al que llegaron el Citibank y después Euroclear para que no repitan el error de ambas entidades de preguntarle a Griesa para poder realizar los pagos y aceptar una negociación con los fondos buitre.

El escrito firmado por Friedman fue presentado un día después de la decisión de Griesa de retener cualquier pago de bonos reestructurados de la deuda, “incluyendo y no limitándose” a aquellos provenientes de Nación Fideicomisos y Caja de Valores. Ahora se espera la resolución de Griesa de repetir la decisión que ya le dio al Citibank de permitir el pago de la deuda en los términos del acuerdo cerrado con los fondos buitre. Según Kicillof, el banco “no tenía por qué preguntar a Griesa qué hacer ya que tiene que obedecer a las autoridades argentinas” ya que está “estrictamente sometido” a las leyes argentinas. “Por más que se trata de una empresa extranjera, debe someterse a las leyes argentinas, tanto como agente financiero como bancario”.

El rol de Euroclear en estas operaciones es el de tener en custodia los títulos públicos de colocación voluntaria de la Argentina y pagos en diferentes mercados.

Comentarios