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Sociedad

“Esto superó al Apartheid”

El embajador de Palestina en la Argentina pasó por Rosario y brindó una conferencia sobre las posibilidades de paz en su patria; criticó el accionar de Israel que arrastró a sus compatriotas a una situación peor que la vivida por Sudáfrica.


Invitado por el Comité Santafesino de Solidaridad con el pueblo palestino, el pasado miércoles 27 de agosto el embajador de Palestina, Walid Muaqqat, brindó la conferencia “La crisis en Palestina, perspectiva para una paz justa” en la Asociación Libanesa de Rosario ante un auditorio repleto. En una entrevista con El Ciudadano, el diplomático dejó su opinión sobre el conflicto en la Franja de Gaza y expresó que en su país superó al Apartheid sudafricano, que los israelíes convirtieron a Gaza en “una cárcel a cielo abierto” y afirmó: “Conseguiremos la paz cuando la comunidad internacional, que a través de las Naciones Unidas (ONU) creó al Estado de Israel, dé su voto para la creación del Estado palestino”.

—¿Qué opina de este último enfrentamiento entre Palestina e Israel?

—Lamentablemente lo que sucedió en la Franja de Gaza ha sido una catástrofe para el pueblo palestino porque fueron los civiles los que pagaron las consecuencias. Israel concentró sus objetivos militares hacia el 90 por ciento de población civil y no hacia la fuerza armada de Hamas. Sólo por este hecho, consideramos la actitud como crimen de guerra. Israel debe responder por lo que ha cometido.
Además, cuando hablamos del conflicto en la Franja de Gaza, no hay que olvidar el fondo del problema, la causa. Siempre, Israel habla de la cuestión como si fuera un problema entre ellos y Hamas, y no se dice nada del problema entre Israel y el pueblo palestino. En realidad, la causa de todo ese problema es la ocupación. Israel tomó todo ese territorio en 1967 y el Concejo de Seguridad de la ONU emitió una resolución, la número 242, que exige la retirada inmediata de Israel de ese territorio porque las Naciones Unidas no admiten la ocupación de territorios por medio de la fuerza.
Entonces, el problema es entre nosotros y ellos. Ellos dicen que es una tierra bajo disputa, y nosotros decimos que la verdad está con la legalidad internacional que dio la ONU. Esta entidad internacional dice que son territorios ocupados. Lamentablemente, hoy la Franja de Gaza es un territorio de 350 kilómetros cuadrados con 1.800.000 habitantes, cercado hace ocho años por mar, por tierra, por aire. Es un territorio que no tiene la posibilidad de ingresar comida, combustibles, ni material de construcción, y con la imposibilidad que tiene la gente de circular. Decenas de miles de palestinos graduados no tienen dónde trabajar. Han hecho un caos, una cárcel con cielo abierto. Ésa es la causa, no lo que dice Israel, que ellos actúan por su propia defensa. Esto no es compatible con la legalidad de la que estamos hablando porque no le corresponde a Israel la autodefensa porque son agresores, en dos sentidos. Primero porque sistemáticamente atacan a la Franja de Gaza, asesinan a líderes políticos. Segundo porque la ocupación es una agresión permanente contra el pueblo palestino. Por esto, Israel es contraria a todas las resoluciones de la legalidad internacional. Ese Estado viola las resoluciones de la ONU que la mandan a retirarse de esos territorios. Israel viola, agrede y el pueblo palestino que está bajo la ocupación tiene todo el derecho de defenderse y resistir contra el ocupante. Resistir es un derecho consagrado por las Naciones Unidas.

—Israel pone un argumento parecido porque ellos dicen que se están defendiendo. Es visto que Hamas está lanzando misiles. ¿Cuál es la estrategia de Hamas?

—Ellos acusan a Hamas pero ese grupo no invadió el territorio de Israel. Hamas no hizo un cerco al territorio de Gaza. Entonces son actitudes militares de Israel peligrosas y agresivas contra el pueblo palestino. Ellos hicieron este cerco y los chicos no tienen medicinas, ni comida.

—Los israelíes dicen que Hamas construye túneles para penetrarlos de forma terrorista.

—Toda trinchera que hace Israel, toda acción militar es válida para ellos. Pero si los palestinos hacen trincheras para defenderse, para protegerse y para atacar a los agresores, no son válidas. Este modo de propaganda israelí ya está caduco porque se muestran al mundo como si ellos fueran los que mandan o con derechos. Por otra parte, ellos pretenden que el enemigo no debe hacer nada para contrarrestar sus ataques. Según esa perspectiva, el pueblo debe atarse las manos y recibir las balas, y permitir los asesinatos.

—¿Cómo ve el conflicto de aquí en adelante?

—En 1993, Isaac Rabin emprendió la política pacifista de reconocer a los territorios palestinos y todo marchaba bien, hacia la paz. En 1995, la derecha a la que pertenece Benjamin Netanyahu asesinó a Rabin porque se oponían al Estado palestino, a la entrega de territorios y a todo. Cuando asesinaron a Rabin, asesinaron al proceso de paz. La derecha entonces tomó el timón del gobierno israelí hasta la fecha. Así empezó un diálogo de sordomudos entre ocupantes y ocupados. Al mismo tiempo se produce un desequilibrio importante de fuerzas, siendo muy superior la de Tel Aviv. Asimismo, Israel está sostenido por Estados Unidos que no permite la presión internacional para obligar al país hebreo a acatar las resoluciones de la ONU, o para que dejen de cometer violaciones a los derechos humanos como lo vienen haciendo hasta ahora. Se realizaron asesinatos selectivos, se encarceló sin procesos, hubo detenciones administrativas, la imposición de un muro, el accionar de los colonos que se meten en las mezquitas o confiscan terrenos de los palestinos. Más de un centenar de mujeres palestinas embarazadas dieron a luz en puestos de control porque no les permitieron pasar a hospitales que quedaron bloqueados por el muro. Ellos convirtieron a las ciudades palestinas en guetos, recordando lo que habían hecho los nazis con ellos mismos. Esa política la están aplicando ahora con nosotros. Todo el mundo va a Palestina, incluso los argentinos, y ven con sus propios ojos los guetos, ven cómo humillan a los palestinos. Los visitantes ven que hay carreteras para israelíes únicamente, mientras los palestinos tienen caminos destruidos y paralelos. Cuando llegaron los sudafricanos a los territorios palestinos, vieron la situación y confesaron que el Apartheid de Sudáfrica no llegó a tanto. Esto superó el Apartheid. En Sudáfrica no había carreteras para negros y para blancos. A los tres jóvenes israelíes que capturaron y asesinaron, que ellos dicen eso porque aún no se probó fehacientemente, pasó en sus rutas. Para que quede claro, la diferencia entre asesinatos entre israelíes y palestinos es de uno a diez, por lo menos. Tras esas muertes de israelíes, ordenaron demoler las casas de palestinos que todavía no habían sido sospechados, ni acusados, ni existían pruebas, ni nada. Mientras que a los judíos que asesinaron y quemaron vivo a un joven palestino, no les demolieron sus casas. Si la política de Israel es así, derrumbar hogares, por qué hay un tratamiento diferente. Entonces, lo que hay es un régimen racista que superó todas las normas de relaciones internacionales. Por eso, cuando hablamos de este aspecto, creo que la solución, la paz no llegará de esta manera. Sino que conseguiremos la paz cuando la comunidad internacional, que a través de la ONU creó al Estado de Israel, dé su voto para la creación del Estado palestino. Ésa es la solución. Este diálogo de sordomudos entre ocupado y ocupante que exige Estados Unidos, no va a servir. Además, las normas para la resolución ya están hechas por la ONU y solamente falta aplicarlas.

Reunión con legisladores

El embajador de Palestina en la Argentina, Walid Muaqqat, fue recibido por legisladores provinciales en Rosario, además de recibir el afecto y el apoyo de más de 50 organizaciones sociales, sindicatos, partidos políticos y grupos culturales de la comunidad árabe de Rosario.

Acompañado por Néstor Suleiman, secretario general de la Federación de Entidades Argentino-Árabes (Fearab), de autoridades de la Casa de Amistad Argentino Palestina y de la Asociación Libanesa de Rosario, el diplomático mantuvo un encuentro previo con los diputados nacionales del Frente para la Victoria Marcos Cleri y Josefina González, junto a los legisladores provinciales José María Tessa, Gerardo Ricco, Mariana Robustelli y Eduardo Toniolli, además de otros referentes sociales y sindicales.

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