Edición Impresa

De visita

En Ecuador, CFK reivindicó el ideal de “Patria Grande”

La ex presidenta se reunió el jueves con el mandatario de Ecuador, Rafael Correa, y recibió una condecoración de parte de la Asamblea Nacional.


La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner se reunió ayer con el mandatario de Ecuador, Rafael Correa, y recibió una condecoración de parte de la Asamblea Nacional, donde habló de la existencia de un plan en la región para destituir a los gobiernos “populares” y reivindicó la “Patria Grande”.

Ante el Parlamento ecuatoriano, la ex jefa del Estado llamó a las fuerzas progresistas a “analizar las causas de los retrocesos” y preguntarse “qué” hicieron “mal”, además de cuestionar al gobierno que encabeza Mauricio Macri.

“No se puede culpar a la derecha, tenemos que evaluar qué no hemos hecho nosotros para lograr esto. Es una cosa regional”, subrayó la ex mandataria.

A su entender, el “gran desafío es analizar las causas de los retrocesos y estas relaciones de fuerzas” para determinar qué se ha “hecho mal”.

Al hablar de la situación de Dilma Rousseff en Brasil, Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que en ese país “cambió la relación de fuerzas”, a la vez que cuestionó el “ataque feroz de los medios” contra la destituida mandataria.

Según dijo, en la Argentina “la derecha conservadora y restauradora de los viejos privilegios y de esa América latina mera exportadora de materia prima con millones de excluidos” también intentó en su contra “un final similar al de Dilma”.

“Estoy convencida de que el objetivo era destituirme para que no pudiéramos terminar el período de gobierno y por lo tanto tener un relato mediático”, resaltó.

“(Las derechas) trabajan en la restauración ni siquiera de lo que fueron los 90, ahora es «pre». En Argentina, por ejemplo, quieren un modelo pre-peronista”, sostuvo. Y agregó: “Quieren un modelo que no sea industrializador, donde la gente y las clases medias tengan una sensación de culpa por lo que lograron en estos años y los que no la tengan la convicción de lo que lograron en estos años no se debió a procesos económicos y políticos sino que se debe a su impronta personal. Si no logran hacerlos sentir culpables, le crean la fantasía de que todo lo que lograron era sólo un esfuerzo individual”.

Según advirtió, “hay una creación del sentido común entre los medios de comunicación y sectores judiciales que persiguen y judicializan a los líderes de la región”.

La ex jefa del Estado remarcó que durante su gobierno “no había despidos, había un régimen de casi plena ocupación y paritarias libres”, además de “una política de subsidios a los servicios públicos que era estigmatizada y hasta criticada muchas veces por los propios”.

“No quiero contarles la que se armó cuando aplicaron el tarifazo. Ahí se dieron cuenta de que la política de subsidios estaba destinada a agregar valor indirecto a sus salarios, a estimular la demanda y a sostener a la actividad industrial de las pymes que, si no, no pueden sobrevivir”, destacó Cristina Fernández de Kirchner.

La ex mandataria recibió la condecoración –una de las más importantes del país– de manos de la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, y luego de dar su discurso se reunió con Correa en el Palacio de Gobierno. El presidente ecuatoriano calificó a Cristina como “una mujer icónica para América latina” y consideró que la ex mandataria argentina es “víctima de la judicialización de la política”.

Comentarios