Pero lo más insólito es que hace casi un año que el gobierno de la provincia de Buenos Aires lanzó una recompensa de hasta 100.000 pesos por su cabeza y nadie –pero nadie– levantó el teléfono para aportar ni medio dato sobre su posible paradero. “¿Quién se va a animar, por sólo 100.000 pesos, a delatar a un tipo como Pérez Corradi, que mandó a ejecutar el triple homicidio más mafioso de los últimos años en la Argentina?”, se pregunta uno de los investigadores que están tras sus pasos.
Se trata de Ibar Esteban Pérez Corradi, el Señor Efedrina. El hombre que está prófugo y es acusado de haber ordenado la ejecución del triple crimen de General Rodríguez, aquel que tuvo por víctimas a los empresarios Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina. El 7 de agosto de 2008, los tres fueron masacrados a balazos y luego arrojados en una zanja. Por ese triple asesinato, Pérez Corradi es buscado por el fiscal de Delitos Complejos de Mercedes, Juan Ignacio Bidone, desde el 20 de marzo de 2013, cuando logró que se dicte pedido de captura.
De acuerdo con la compleja investigación del fiscal, Pérez Corradi, un empresario del rubro de los medicamentos, vio amenazado por Forza su negocio de la provisión de efedrina para narcos mexicanos que necesitan esa droga para fabricar metanfetaminas, y ordenó eliminar a su posible competidor.
El mensaje mafioso fue clarito. Primero aparecieron los autos abandonados o incendiados en Flores y en Constitución. Y seis días tardaron en encontrar los cuerpos de los tres empresarios. Estaban en un zanjón de General Rodríguez.
Bina tenía cuatro balazos y además le cortaron en vida la oreja derecha. Ferrón tenía cinco tiros y a Forza lo dejaron para el final y le dieron la mayor cantidad de disparos: siete en total.
En diciembre de 2012, la Justicia logró condenar a prisión perpetua a los cuatro presuntos autores materiales, que son dos pares de hermanos: Martín y Cristian Lanatta y Víctor y Marcelo Schillaci. Pero a Pérez Corradi no lo pueden atrapar pese a que tiene “red note” en la página de los más buscados por Interpol.
Hubo varios allanamientos y hasta lo buscaron en Paraguay, pero nada dio resultado. Recién en julio del año pasado, el fiscal Bidone logró que el Ministerio de Seguridad bonaerense ofreciera una recompensa de entre 20.000 y 100.000 pesos para quienes puedan aportar datos que ayuden a capturarlo. Nadie llamó.
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