El gobernador Miguel Lifschitz recibió ayer al ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, para analizar la situación de Santa Fe y acordar medidas para mitigar las consecuencias de los tres grandes temporales y la sucesión de tormentas que afectan territorio provincial desde diciembre del año pasado. Del encuentro participaron funcionarios de las dos administraciones y representantes de productores de todo el territorio santafesino afectados por el estrago, quienes no quedaron conformes con las respuestas del funcionario del presidente Mauricio Macri, pese a que dijo que la Nación declararía en emergencia hídrica a la provincia.
Llfschitz anticipó que ayer mismo había firmado “la renovación del decreto anterior de emergencia en 18 de los 19 departamentos de la provincia, “para acelerar los plazos, para no obligar a los productores a hacer todos los trámites de presentación nuevamente”.
“Se lo entregamos al ministro para que sea ratificado y homologado a nivel nacional”, indicó.
Por su parte, Buryaile, quien llegó al gobierno nacional tras ser dirigente rural y legislador en su provincia, Formosa, no comprometió la emergencia pero anunció: “Hemos convocado a la Comisión de Emergencia Agropecuaria para el día 19 (por el jueves), para tratar la declaración”. Y marcó que a partir de la misma jornada de ayer había “espera impositiva, espera bancaria, suspensión de ejecuciones”, y también liberación de fondos para los productores. “Aunque va a llevar otro trámite, aclaró.
“El gobierno nacional no le va a sacar el cuerpo a la situación”, comprometió el ministro. “Pero sí queremos ponerlo inteligentemente, y acompañar este esfuerzo que está haciendo el sector productivo y la provincia de Santa Fe”, añadió.
Antes, Lifschitz había descrito la comprometida situación que atraviesa Santa Fe incluso ya desde antes del recambio del poder político en la provincia y en el país. “En 2016 –explicó–, cuando iniciamos nuestras gestiones, tuvimos inundaciones, con el río Paraná alto y con lluvias intensas que duraron varios meses y registraron su pico en el mes de abril”.
“Todos esperábamos –explicó el jefe de la Casa Gris– que este año fuera distinto. Se pronosticaba un verano seco. Sin embargo, esto no ocurrió”.
En ese marco, el gobernador hizo hincapié en las consecuencias: “El impacto sobre la producción láctea es muy duro, pero también sobre otros sectores agropecuarios”, explicó.
“Venimos avanzando en distintos temas, hemos hecho acuerdos con el gobierno de Córdoba y el Estado nacional para trabajar de manera tripartita los temas que tenemos en común”, agregó el mandatario mencionando el arroyo Cululú, la laguna La Picasa, y la cuenca del río Carcarañá. También mencionó las dificultades hídricas con Chaco, provincia con la que históricamente compartió los Bajos Submeridionales, hoy canalizados.
El ministro Buyaile indicó que está en sintonía similar: “Venimos a trabajar con el gobierno de Santa Fe y los productores para sobrellevar esta situación de forma integral. Venimos a evaluar qué necesitamos solucionar en la coyuntura, pero fundamentalmente qué cosas tenemos que hacer para que esto no vuelva a suceder”.
Productores piden ayuda
El presidente de Federación Agraria, Omar Príncipe, quien participó ayer de la reunión en Santa Fe con el gobernador Miguel Lifschitz y el ministro nacional Ricardo Buryaile, solicitó “urgente asistencia del Estado en materia alimentaria y financiera para que los productores que sufren las inundaciones puedan seguir produciendo”. Y calificó la situación hídrica de Santa Fe: “Es un desastre pocas veces visto en nuestra provincia”, aseguró.
“Estamos todos tratando de cuantificar los daños, hay más de un millón de hectáreas perdidas, que se suman a la pérdidas de 2016. Esta situación amerita mucho más que los fondos de emergencia que ya de por sí, veníamos diciendo que son insuficientes”, señaló.
Príncipe reclamó “fondos extraordinarios de Nación para atender a los productores en emergencia”, y advirtió: “Si esos fondos no llegan, va a ser el último período de muchos como productores agropecuarios”.
Con gravedad, el presidente de Federación Agraria indicó que “los productores chicos quiebran, igual que los tamberos, que se sumarán a los tambos que ya cerraron en 2016”.
Asimismo, pidió ayuda para los productores de cerdos, “que hay muchos en el sur de Santa Fe, por eso es necesario un auxilio mayor”.
Príncipe consideró que “la inversión que se necesita en obra pública tiene que tener en cuenta también las zonas urbanas”.
“Tenemos que trabajar en una política de ordenamiento territorial, rural y urbano. Hoy perdemos millones de dólares de producción pero también tenemos zonas urbanas más pobres”, dijo.
En este orden, manifestó: “Necesitamos política pública de ordenamiento territorial, y ordenar el uso del suelo en función de la aptitud de los mismos, y que traiga oportunidades para todos. En eso también se necesita sostener a los pequeños productores, y para ello una nueva Ley de Arrendamiento es una herramienta para promover la diversificación y la rotación para favorecer la absorción y el drenado de aguas”.
Regreso para recorrer zonas inundadas
El ministro de Agroindustria de la Nación, Ricardo Buryaile, regresó ayer a Buenos Aires, pero hoy volverá a viajar para recorrer distintas zonas inundadas de la provincia de Santa Fe antes de reunir, el jueves, a la Comisión de Emergencia Agropecuaria para analizar la prórroga de la emergencia decretada el año pasado, tras las lluvias de abril.
El funcionario nacional no quiso adelantar qué medidas tomará su ministerio, pero dijo que ya están decididas y que se anunciarán en los próximos días: “El gobierno nacional no le va a sacar el cuerpo a la situación, vamos a acompañar al gobierno provincial y a cada uno de los productores”.
Buryaile llegó ayer por la tarde a la ciudad de Santa Fe donde se reunió, en la Casa Gris, con el gobernador Miguel Lifschitz, parte del gabinete provincial, legisladores nacionales y locales y miembros de las entidades productivas.
“Vinimos a Santa Fe por instrucción del presidente para dialogar con el gobierno y los productores, para tratar de sobrellevar la situación. Necesitamos coordinar el trabajo entre provincia y Nación para que no vuelvan a suceder estas situaciones frente a fenómenos climáticos”, sostuvo Buryaile tras el encuentro en Casa de Gobierno.
“Desgraciadamente, ya tenemos experiencia en estos casos, por lo que pondremos en marcha la prórroga de los impuestos nacionales, los vencimientos bancarios, créditos del Banco Nación y otras medidas que iremos analizando”, adelantó Buryaile al ser consultado por los temas que abordará el jueves con la Comisión de Emergencia Agropecuaria.
El ministro de Agroindustria recorrerá hoy Rafaela y otras zonas de la provincia afectadas por las inundaciones. Dijo que su intención es “conversar con la gente y tener un mano a mano para saber las vivencias. Cada región tiene una particularidad. La buena noticia es que se avizoran diez días de sol y eso permitirá trabajar”.
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