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Reflexiones

Curioso: cae exportación de bienes y crece la de servicios

La Argentina exportaba 13.820 millones de dólares en servicios en 2010 y el año pasado llegó a 14.046 millones de dólares, superando en 2015 el número de exportaciones logradas en 2014.


Una de las curiosidades que mostró el comercio internacional argentino en el último ejercicio anual es que mientras cayeron fuertemente las exportaciones de bienes físicos (mercancías), crecieron –levemente– las exportaciones de servicios.

También en el mundo, el año pasado (en el marco de un decrecimiento general) las exportaciones de servicios crecieron como porcentaje del comercio internacional total, porque han mostrado mejor capacidad de adaptación a la baja de los precios internacionales.

La Argentina exportaba 13.820 millones de dólares en servicios en 2010 y el año pasado llegó a 14.046 millones de dólares, superando en 2015 el número de exportaciones logradas en 2014. Sin embargo, las exportaciones de servicios argentinas habían sido mucho más altas en 2013, 2012 y 2011. Decayeron en 2014, y se recuperaron levemente el año pasado (cosa que no lograron las de bienes).

Viajes de personas, transporte de cargas, servicios profesionales, actividades financieras, prestaciones profesionales, producción dirigida al esparcimiento, productos audiovisuales y de contenidos comunicacionales, software, actividades vinculadas con la publicidad, diseño, acciones culturales, soportes para las tecnologías de la comunicación.

Todas las anteriores son parte de las muchas actividades que componen el gran conjunto de las exportaciones de servicios. En la Argentina, el transporte de personas y cargas es –lejos– el conjunto de actividades de mayor incidencia en el comercio internacional de los servicios.

Las exportaciones de servicios en la Argentina han ganado relevancia relativa al punto de que, mientras en 2010 equivalían al 20 por ciento del total de exportaciones de bienes, en el último ejercicio anual (2015) llegaron a equivaler al 25 por ciento del total de exportaciones de mercancías. Este año, repetirán ese porcentaje.

Pese a ello, en nuestro país el comercio de servicios es deficitario (más de 3.000 millones de dólares de déficit en cada uno de los últimos 4 años –3.925 millones de déficit el último año–). Desde hace diez años, los servicios siempre generaron déficits en sus cuentas internacionales. El turismo emisivo es la gran razón del déficit comercial en la materia.

Pero la verdad es que los servicios son –en términos relativos– cada vez más relevantes en todo el comercio internacional. Por un lado, como componentes de las exportaciones mundiales de bienes (dice la Unctad que casi el 40 por ciento del valor agregado de cada año en las exportaciones de bienes de todo el mundo está formado por servicios). Y, a la vez, también los servicios crecen en sí mismos como parte del comercio transfronterizo. Las exportaciones de servicios en el mundo llegaron el año pasado a una cifra relativa al comercio total que fue récord, y que equivale al 29 por ciento del total de exportaciones de bienes físicos.

Estados Unidos exporta el 14 por ciento del total de servicios comercializados internacionalmente en el mundo y es el líder en la materia, mientras el Reino Unido (segundo principal exportador) exporta el 7 por ciento del total, China lo hace con el 6, Alemania con el 5 y Francia lo mismo. Si se suman a ese grupo Holanda, Japón, India y Singapur, nos encontramos con que ellos generan la mitad de todas las exportaciones de servicios del mundo: hay casi 200 países en el planeta y sólo 8 exportan la mitad del total. La Unión Europea en su conjunto exporta el 25 por ciento de la suma de los servicios comercializados en el mundo. Algo relevante es que hay países que no son desarrollados (China, India, Singapur, todos asiáticos) que pertenecen a ese selecto grupo.

Entre los latinoamericanos, Brasil (32º) y México (39º) son los más relevantes. La Argentina es el tercer principal exportador de servicios de Latinoamérica. Esto la pone en una posición que mejora su lugar como exportador de bienes, donde además de Brasil y México, la supera Chile, y la había superado hasta 2014 Venezuela antes de que los precios del petróleo cayeran mucho más que los de los productos de origen agropecuario.

Las exportaciones mundiales de servicios fueron el año último de 4,75 billones de dólares y, si bien han caído por el descenso de precios en los últimos dos años, esa retracción ha sido mucho menor que el descenso de exportaciones de manufacturas en el mundo. Pese a aquel descenso explicado por precios, en todo el mundo las exportaciones mundiales de servicios están cerca de los niveles que habían alcanzado en 2013 (fueron el año último 10 por ciento menores), mientras las de bienes físicos descendieron más, hasta niveles similares a los de 2010.

Una de las principales novedades en los acuerdos comerciales internacionales surgidos en el mundo en los últimos años es que –a diferencia de lo que ocurría hace unas décadas, por ejemplo, cuando nació el Mercosur, cuando sólo los países acordaban apertura recíproca sobre el comercio de bienes–, en los nuevos tratados comerciales internaciones los países acuerdan condiciones para facilitar el intercambio internacional de servicios. Así ocurre, por ejemplo, en las negociaciones para el acuerdo entre Estados Unidos y la Unión Europea: en estas negociaciones, se prevé normas relativas al comercio de servicios, el electrónico, la propiedad intelectual, la contratación pública, las marcas y hasta los derechos de autor en internet. Desde 2000, se firmó en el mundo un centenar de tratados internacionales que prevén el comercio de servicios como disciplina de la integración comercial (hoy, alrededor de un tercio de los tratados comerciales regionales vigentes en el mundo incluyen la liberalización de comercio de servicios entre los signatarios)

El comercio de servicios será, pues, cada año más relevante.

La Argentina está considerada un país con potencial por sus recursos humanos, su multiculturalidad, la tecnología instalada y la creatividad de su ambiente. La tan mentada agregación de valor reclamada para las exportaciones puede surgir de las exportaciones de servicios, que así como en el mundo crecieron 80 por ciento en la última década generan oportunidades para países que compiten por atributos cualitativos más que por menores costos.

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