Paolo Montero insiste. Aunque sabe que la negociación entre los clubes está complicada, el técnico quiere que Federico Carrizo llegue como refuerzo a Central. Al menos, a favor de esta posibilidad, existe un dato importante: en caso de que las tratativas con Boca lleguen a buen puerto, los dirigentes del Canalla ya acordaron el nuevo contrato con Pachi. Claro que ese vínculo recién entraría en vigencia desde el año entrante.
Además, Carrizo no es tenido en cuenta en Boca. Y, al menos por ahora, no hay ningún equipo interesado en sumarlo. Por lo que, en Arroyito, y con el tiempo como aliado, mantienen expectativas de poder incorporar a Pachi al plantel que comanda Montero antes de que cierre el libro de pases.
¿Cuáles son las trabas que impiden avanzar a Central por la llegada de Carrizo? Las principales serían dos: la alta cotización de Carrizo por parte de los xeneizes (NdR: piden unos dos millones de dólares por el 60% del pase), y saber quién se hará cargo del contrato de Pachi durante 2017.
En este escenario, los dirigentes centralistas consultados sobre el estado de la negociación admiten que la llegada de Carrizo “está lejos”. Del mismo modo que aseguran que siguen “trabajando” para repatriarlo.
Una prueba de ello es que los dirigentes estarán en Capital Federal. Y esperan cruzarse en AFA con sus pares de Boca. Allí intentarán algún contacto en la búsqueda de destrabar la negociación. En caso de no conseguir el objetivo durante la semana, y más allá del deseo de Montero, los directivos de Central buscarían otras alternativas para cubrir la vacante que dejó Montoya.
Al menos, los de Arroyito sí avanzaron con el representante de Pachi, Martín Guastadisegno, y acordaron el nuevo contrato que tendría el volante en Central, que entraría en vigencia desde 2018.
Pero lo que no está resuelto aún es quién se hará cargo de lo que gana el jugador durante este año. Los canallas consideran que el salario de Carrizo es muy alto para el actual presupuesto del fútbol profesional auriazul. Y pretenden que Boca cubra una parte del costo.
Además de este punto, los auriazules deben negociar con los xeneizes la compra de una porción de ese 60% de los derechos económicos del pase de Carrizo que posee Boca. La intención de Central es la de adquirir entre un 10 y un 20% de esos derechos. Pero esperan también que los xeneizes reduzcan sus pretensiones. Es decir, que la cifra que soliciten no esté en relación a la cotización que comunicaron por el valor del 60% del pase (unos dos millones de dólares).
Las otras opciones
Decididos a insistir por Carrizo, pero sabiendo que no será sencillo lograr el objetivo, los dirigentes de Central tienen otros nombres de volantes en carpeta. En la nómina están los de siempre: Gabriel Gudiño, Ramiro Carrera y Facundo Silva.
Pero sabiendo que hoy en AFA podría aprobarse el tercer cupo de refuerzos para todos los equipos de primera división, los directivos auriazules analizan ir de todos modos por un reemplazante de Montoya. Esto sería, por encima de la posible llegada de Carrizo.
De todos modos, antes de hacer algún movimiento, esperarán por la aprobación del tercer cupo. Y también, aguardarán por la posibilidad de desprenderse de algún extranjero, lo que permitiría ampliar las opciones de posibles refuerzos.
Los dos extranjeros del plantel que no juegan como titulares son Hernán Menosse y Washington Camacho. Pero no hay ofertas ni sondeos por ninguno de ellos.
¿Sólo fue un rumor?
La versión de que Claudio Chiqui Tapia, uno de los candidatos a ocupar el sillón de AFA, le ofrecería una vicepresidencia a Central generó distintas repercusiones en el fútbol rosarino. Y el que habló del tema fue el titular del Canalla, Raúl Broglia.
“Chiqui Tapia siempre nos dijo que nos iba a tener en consideración para el reparto de cargos tanto a Central como a Newell’s, pero nunca dijo cuál sería ese cargo”, aclaró Broglia sobre el tema. Así, en diálogo con Sentimos Fútbol, tira deportiva que se emite diariamente por AM 1330 y FM 96.1, el presidente de la entidad de Arroyito le bajó los decibeles a este fuerte rumor.
“De alguien surgió eso de la vicepresidencia para Central, pero no sabemos de quién; lo que tenemos en claro es que, si Central ocupa un cargo, Newell’s debe hacerlo al año siguiente o viceversa”, explicó Broglia. Y agregó: “Ahí estará la verdadera unidad”.
Marco Ruben entrenó a la par del resto
Paolo Montero arrancó la semana de trabajo con una muy buena noticia. Es que Marco Ruben entrenó a la par de sus compañeros. El delantero dejó atrás un problema que padecía en el talón izquierdo y que le impidió entrenar en forma normal durante las últimas tres semanas. Como contrapartida, el que todavía no se recuperó del inconveniente físico que sufre es Mauro Cetto, quien sigue sin recibir el alta médica.
Con el ensayo ante Vélez en la mira, que se jugará el sábado por la mañana en el Gigante de Arroyito, el plantel canalla comenzó ayer la semana de entrenamiento. Y lo hizo en horario matutino en las instalaciones del country de Arroyo Seco.
Allí, la novedad la protagonizó Ruben. El goleador auriazul fue exigido en la práctica del mismo modo que sus compañeros, tanto en lo físico como en lo futbolístico. Y respondió bien. Por lo tanto, no quedaron secuelas del edema óseo que le detectaron en el calcáneo izquierdo (talón). Esa lesión mantuvo a Ruben poco más de tres semanas fuera de la consideración de Montero. El DT uruguayo sólo contó con el artillero en el primer ensayo de pretemporada, cuando Central perdió ante Patronato de Paraná. Ahora, ya recuperado, Ruben seguramente sumará minutos el sábado que viene ante los de Liniers.
Otro que se integró sin problemas a los trabajos grupales fue Washington Camacho. El polifuncional volante había sufrido una molestia muscular menor que le impidió estar a las órdenes de Montero en el amistoso del último jueves, en el empate sin goles ante Atlético Paraná.
Los únicos dos futbolistas que entrenaron en forma diferenciada al resto fueron Mauro Cetto y César Delgado. El Colo transita la última etapa de rehabilitación del desgarro que padeció en un cuádriceps hace más de tres semanas. Mientras que el Chelito también se repone de una lesión muscular. Aunque en el caso de Delgado, todavía sigue cumpliendo la sanción disciplinaria por doping, que finaliza a mediados de este año.
Javier Pinola, en tanto, sigue siendo exigido en lo físico a la par de sus compañeros. Pero todavía no fue habilitado para participar en ejercicios en los que haya riesgo de choque, como un ensayo de fútbol, o los habituales trabajos con pelota en espacio reducido. El regreso de Pinola sigue sin fecha concreta, pero especulan que, de no mediar imponderables, podría darse hacia fines de marzo.
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