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Saldo favorable

Con el vaso medio lleno

En las primeras diez fechas, los de Coudet lograron el objetivo. Lo positivo y lo negativo en este informe especial.


El primer tercio de torneo quedó atrás. Y, desde lo matemático, el Central de Eduardo Coudet consiguió darle sustento al objetivo trazado, ser protagonistas del torneo. Con 22 puntos sobre 30 en juego, el Canalla es segundo junto a Belgrano de Córdoba, de los líderes River y Boca.

En estos primeros 10 partidos los auriauzles mostraron distintas facetas. Y estas, más allá de lo inobjetable de la campaña, dejaron para el análisis, tanto cuestiones positivas como negativas.

Lo positivo

Ruben, el nombre del gol

Haber motorizado todos los esfuerzos posibles para repatriar a Marco Ruben asoma, al menos por ahora, como uno de los grandes aciertos del Chacho. Es que el delantero oriundo de Capitán Bermúdez pagó con creces la confianza que en él depositó Coudet, que hasta le otorgó la cinta de capitán del equipo.

Dueño de ocho goles, hoy máximo artillero del torneo, permite calificar de notable la tarea de Ruben en este primer tercio de torneo. Fue titular en los diez partidos y, salvo en el final ante Racing, estuvo siempre en cancha.

Además de su capacidad goleadora, aportó oficio y hasta se dio el gusto de entregar una asistencia para un gol de Cervi.

Hace dos partidos que no anota, es cierto. Comparado con su aporte, al menos hasta acá, el dato negativo es un grano de arena en el desierto.

Cervi y Donatti, destacados

Una de las saludables irrupciones en este campeonato fue, sin dudas, la de Franco Cervi. Dueño de una gambeta en velocidad que trajo dolores de cabeza para la mayoría de sus marcadores, el aporte del juvenil volante ofensivo Canalla se hizo sentir.

Titular en todos los encuentros, acreedor de tres goles y cuatro asistencias, Cervi fue uno de los engranajes que mejor funcionó en el sistema ofensivo del equipo.

Con apenas 13 encuentros en primera división, y próximo a cumplir los 21 años (será el 26 de mayo entrante), el desafío de Cervi pasará ahora por mantener su buen nivel durante el resto del torneo. Algo nada sencillo.

Otro que viene cumpliendo un papel importante es Donatti. Después de la irregularidad que mostró el año pasado en su rendimiento, el Flaco se afirmó en la última línea acompañado por el casi debutante Yeimar Gómez Andrade.

A su sólida tarea en defensa, Donatti le agregó goles. Hizo uno en cada uno de los últimos tres partidos. Jugó siempre, desde el minuto inicial, y en forma completa. Sólo recibió una amonestación.

Un arranque histórico

Central está protagonizando un arranque de torneo histórico. Con este invicto de 10 partidos, en el que logró seis triunfos y cuatro empates, el equipo de Coudet ya igualó la segunda mejor marca en primera división. Esa le correspondía a Miguel Russo, por lo hecho en el Apertura de 1997.

El mejor antecedente data del Nacional de 1975, con trece partidos sin derrotas. El Canalla también instaló con esta campaña un récord de victorias consecutivas de arranque, con cinco éxitos en fila.

La propuesta: el protagonismo

En su debut como técnico, Eduardo Coudet consiguió, en poco tiempo, darle una identidad al equipo. Desde la llegada del Chacho, Central apostó por una fórmula de juego distinta a la que venía utilizando con Russo. Y la diferencia quedó expuesta de inmediato.

El Canalla dejó de lado el pelotazo, y se apoyó en la posesión del balón como propuesta para salir a buscar los partidos. Así, el equipo ganó en protagonismo.

Salvo ante Colón de Santa Fe, donde fue dominado en buena parte del trámite, y durante algunos pasajes de otros partidos, Central logró el objetivo. Pero, además, lo acompañó con resultados. Algo indispensable para sustentar cualquier idea.

Lo negativo

Las lesiones musculares

Las lesiones musculares complicaron a Coudet en la búsqueda de un once ideal. La pretensión de “equipo intenso” generó un entrenamiento de alta exigencia durante cada semana.

Hubo cinco jugadores que sufrieron problemas musculares de relevancia. Dos de ellos, Pablo Álvarez y Gustavo Colman, arrastraban una inactividad importante. Ambos venían de jugar su último partido oficial en marzo del año pasado. Pero los otros tres lesionados, Damián Musto, José Luis Fernández y Maximiliano González, venían en rodaje.

A estas situaciones, se sumaron otras particulares: Nery Domínguez comenzó la temporada recuperándose de un desgarro, y recién jugó en la quinta fecha ante Temperley. Mientras que Tomás Berra (operado de una hernia inguinal), y Pablo Becker (en tratamiento kinésico por una hernia lumbar), nunca estuvieron a disposición de Coudet.

El reemplazo de Álvarez

A Coudet le costó encontrar un reemplazante para cubrir la baja de Pablo Álvarez. El lateral derecho jugó por última vez en la cuarta fecha, en la visita a Olimpo en Bahía Blanca. Allí sufrió una lesión muscular, a la que se sumó un problema personal que lo tuvo fuera del equipo cinco semanas.

Elías Gómez y Jonathan Ferrari fueron las opciones por las que apostó el Chacho para reemplazarlo. Y ninguno de los dos dio la talla. Recién en la novena fecha, apareció el tucumano Víctor Salazar. En los cuatro partidos anteriores, Central dio ventajas en ese sector defensivo.

Colman fuera de ritmo

Cada vez que le tocó ingresar, Gustavo Colman mostró que es “distinto”. Y, generalmente, el volante marcó diferencia. Pero después de disputadas 10 fechas, lesión muscular de por medio, Colman no pudo encontrar el ritmo suficiente como para ser titular. Sólo estuvo desde el inicio ante Crucero del Norte en Misiones, y no fue su mejor puesta en escena. En cambio, cada una de las cinco veces que ingresó desde el banco, su aporte dejó marca en el partido.

Coudet lo piensa como pieza clave en su once ideal. Pero Colman sigue pagando el costo de estar casi un año sin jugar en forma oficial.

El plantel corto

Mientras el Chacho espera tener a la mayoría de los suyos en ritmo futbolístico, y en plenitud física, queda a la vista que el de Central es un plantel “corto”. Y la valoración tiene que ver con la pretensión de los auriazules de ser protagonistas del torneo. Los demás “candidatos”, cuentan con más “piezas” para darle sustento a su objetivo de máxima.

Salvo en ataque, donde el Chacho cuenta con varias opciones, en el resto de las líneas hay poco recambio. Y salvo algunas excepciones, cuando faltó algún titular, se sintió.

Fernández, vuelta difícil

Después de gozar del fin de semana libre, los auriazules regresaron ayer al trabajo. Y las novedades no fueron las mejores para Eduardo Coudet. Es que José Luis Fernández, que se repone una lesión muscular, sigue entrenando en forma diferenciada. Y así, complicó su chance de regresar al equipo para recibir este sábado a Huracán. Además, Fernando Barrientos no entrenó ayer debido a que sufrió un esguince de rodilla izquierda, y no estará a disposición para este fin de semana. El plantel volverá a entrenar hoy, nuevamente en Arroyo Seco. Y mañana habrá ensayo de fútbol por la tarde en el estadio.

En tanto, ayer se supo que el partido del sábado, que se jugará desde las 20.30 en el Gigante, será arbitrado por Darío Herrera.

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