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Catupecu revisita sus raíces para reencontrarse con su esencia

A modo de festejo por sus 20 años, la agrupación argentina emprendió “El grito después”, una gira internacional con la que desembarca en Rosario, en el marco de la cual editó un set box que contiene dos DVDs, dos CDs y un racconto de fotos inéditas.


Los fanáticos de la primera hora recordarán aquella tapa del primer disco de Catupecu Machu, esa que recreaba en oposición “los tres monos sabios”, esos que no ven, no escuchan, no hablan, pero que en la portada de Dale! no sólo abrían los ojos, los oídos y la boca sino que invitaban a gritar. Ahora, 20 años después de ese “grito” que también figura en varias canciones de la agrupación que lidera Fernando Ruiz Díaz, surgió “El grito después”, un tema que da nombre al nuevo box set que contiene dos DVDs: uno con una película que recorre la carrera de la banda y otro con un resumen de tres recitales; y dos CDs: uno con un compendio de clásicos y otro con temas nuevos y una reversión de “Para vestirte hoy”, de Lisandro Aristimuño. En clara alusión a la esencia de la banda, El grito después también da nombre a la gira festejo por sus 20 años que pisará suelo rosarino esta noche, a partir de las 22, en Club Brown (Francia y Brown), “resignificando todo eso, mostrando cómo es el grito de la banda, hoy por hoy”, según puntualizó Macabre, tecladista de Catupecu, en diálogo con El Ciudadano.

De la mano de un extenso playlist que contendrá todos los grandes hits, aquellas reversiones más emblemáticas y el nuevo tema cuya principal estrofa reza: “El llanto al nacer/ el grito después/ quien escucha al hombre/ cuando nadie responde”, Catupecu llevará adelante en Rosario “la tercera fecha de una gira que comenzó el sábado pasado en el Luna Park y que también va a ir a tocar a costas colombianas y peruanas, entre varias otras”.

“Tenemos mucha expectativa porque estuvimos mucho tiempo guardados armando el box set y todo lo que implica el festejo de estos 20 años, así que tenemos muchas ganas de salir de nuevo al ruedo”, confesó Macabre.

Un libro de fotos, película, discos de audio: el nuevo box set de Catupecu es eso y mucho más; porque es también un repaso por la carrera de esta emblemática banda argentina en diversos soportes. “Fue un trabajo muy extenso e intenso: había mucho material fotográfico, videos, audios. Primero, tuvimos que juntar todo, digitalizarlo, empezar a filtrar cosas. Fue muy fuerte porque desempolvamos cosas que hacía rato que no veíamos, es como revisitar las raíces y, a la vez, reencontrarnos con nuestra esencia”, dijo el músico mientras que, consultado por lo que más lo movilizó de toda esa vuelta al pasado, puntualizó: “Lo más significativo fue la etapa con Gabriel (Ruiz Díaz), revivir todo eso fue muy fuerte”, expresó, recordando a uno de los fundadores de la banda (hermano de Fernando) quien tuvo que abandonar la formación tras sufrir un grave accidente en 2006 que le dejó graves secuelas.

“En la película hay de todo”, describió. “Son imágenes de archivo, algunas cosas que fueron filmadas por nosotros mismos, otras que extrajimos de canales de televisión o que nos mandó la gente; el material es muy variado, incluso desde la calidad. Hay cosas que se bajaron de VHS, algunas tomadas por videocámaras buenísimas y otras con celulares. Tratamos de ingresar data de todas las fuentes posibles. Después de seleccionar y editar todo minuciosamente, quedó una película en la que el guión se desprende del mismo archivo; sólo hay algunas placas que ubican espacio-temporalmente pero nada más; no está intervenido ni filmamos cosas nuevas”, expresó.

Acerca del secreto de sobrevivir 20 años y seguir vigentes, el músico dijo: “La afinidad espiritual, eso es lo que nos unió a todos los músicos que trabajamos en Catupecu. Ninguno de nosotros surgió de un casting o de una reunión laboral, sino que somos todos amigos. Después de las situaciones extremas que vivimos, sabemos que fue eso lo que permitió que la banda siguiera en pie”.

“Lo que permanece en el tiempo es la esencia; el audio fue cambiando disco a disco, es inherente a la banda buscar cambios desde lo melódico, lo armónico y lo tímbrico; ir experimentando con nuevos instrumentos. Muchas cosas van cambiando porque, con el tiempo, vas ganando profesionalidad, experiencia y algunas cosas las encarás de otra manera, pero cuando subís al escenario te seguís poniendo nervioso, y al momento de grabar un disco la manera de conectar es la misma. Lo que va evolucionando en el tiempo es la manera de armar un show en forma más profesional; eso permite que queden más compactos, más prolijos, que tengan una puesta un poquito más importante”, enumeró Macabre mientras que, consultado por alguna agrupación nueva que llegó a sorprenderlo en estos últimos años, nombró a Connor Questa, que también toca en la ciudad esta noche, a partir de las 23.30, en Pugliese (Corrientes 1530). “Si llegan a coincidir los horarios nos vamos a cruzar, por ahí nos vamos al show de ellos o viceversa. Por suerte, hay una renovación, porque sino sería una repetición continua de bandas con larga trayectoria. Sobre todo, este último año, hubo una aparición de bandas nuevas con una propuesta bastante interesante. Las bandas nuevas traen esencias y energías nuevas y siempre está buenísimo que eso suceda”.
Catupecu, “animal de estudio y de escenario”
“Catupecu Machu es un animal de estudio y de escenario. Somos una banda que nos hicimos entre el estudio y el vivo, y siempre están esas ansias de descubrir nuevas canciones y nuevos escenarios”, explicó Fernando Ruiz Díaz en diálogo con la agencia de noticias Télam poco antes de su presentación en el Luna Park, el puntapié inicial de la gira que hoy pasa por Rosario. Respecto del box set que salió a la venta el pasado 19 de agosto, el vocalista comentó: “Es un montón de cosas, una edición limitada con libro de fotos, CDs de música y una película que se llama El grito después, que es alucinante porque recorre toda la historia de la banda con imágenes que fuimos filmando en su momento: no hay nada que hayamos filmado ahora especialmente para la película”.

Además, el líder de la banda que también integran Macabre, Sebastián Cáceres y Agustín Rocino definió a Catupecu como un animal inventado por él hace muchos años, “con la que vivimos la introspección del estudio y la energía de los escenarios; eso es lo que veo cuando miro este recorrido, así como también ese deseo, esas ansias de recorrer nuevas islas que son los temas nuevos y los nuevos escenarios. En cada país, cada ciudad en la que estamos, descubrimos una nueva isla que es el escenario”.

Para concluir, el también compositor de la agrupación que, entre otros premios, estuvo nominado dos veces al Grammy Latino, saludó con un enérgico “felices 20 años”, a lo que agregó: “Por 20 años más, festejaremos los 40 y después hablamos”.

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