El resultado de estudios complementarios a restos del cuerpo de Gerardo Pichón Escobar, el empleado municipal que fue visto con vida por última vez en el bar La Tienda y cuyos restos fueron hallados una semana más tarde flotando en el río Paraná, a la altura del parque Urquiza, descartan que la causa de muerte sea ahogamiento y apuntan que en realidad murió por asfixia.
El nuevo estudio se pidió luego que la autopsia realizada el 21 de agosto pasado no pudiera determinar « la causa básica de la muerte». Ante esto, se enviaron muestras de tejidos y órganos al Instituto Médico de Santa Fe y a la Dirección General de Asesorías Periciales de la ciudad de La Plata, para la realización de exámenes complementarios.
El resultado de los estudios realizados en la ciudad platense señala que no se detectó la presencia de plancton (algas microscópicas de agua) y que si se encontraron cambios morfológicos en la zona pulmonar que permiten “identificar cambios morfológicos observables en un cuadro de asfixia”. “Esa modificación en el tejido pulmonar son compatibles con la asfixia”, señaló el fiscal Rafael Coria, quien forma parte de la investigación del caso.
Coria sostuvo que con estos y otros informes, “tenemos elementos como para hacer un informe pericial definitivo. Igualmente faltan algunos estudios que han sugerido para hacer el informe definitivo”.
Dicho informe tiene además las entrevistas realizadas en los últimos 30 días a vecinos de la zona del bar “La Tienda”, personas que estuvieron en dicho lugar la última noche que se vio a Gerardo con vida; personal de Prefectura Naval que ratificó el procedimiento de levantamiento del cadáver a orillas del río Paraná, conductores de taxis y de móviles de Gendarmería, Prefectura y de Policía que circularon por las inmediaciones del bar –teniendo en cuenta los informes de GPS de los mismos– y testigos que espontáneamente brindaron relatos sobre la noche del 14 de agosto pasado, última vez que Gerardo Escobar fue visto con vida.
“Falta un informe toxicológico y otro que estamos gestionando: una autopsia virtual, que es un escaneado capa por capa del cuerpo que si bien es complementario, podrá dar mayores elementos para el diagnóstico definitivo”, agregó Coria.
Por el caso, el 31 de agosto se realizó una audiencia imputativa en la cual se le atribuyó a Cristian Jesús V., patovica del bar La Tienda, el delito de homicidio y a José Luis C., César A. (también patovicas) y los policías Luis Alberto N. y Maximiliano A., del delito de encubrimiento agravado (del homicidio).
En la causa, el pasado 17 de septiembre se constituyeron como querellantes María y Norma, hermana y madre de Gerardo, respectivamente.
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