El juicio oral que se sigue contra Leandro “Pollo” Vinardi, un hombre de 30 años acusado de asesinar en 2013 a Sergio Pared, de 50, giró ayer en torno de dos ejes. Por un lado, la Fiscalía desistió de convocar a uno de sus principales testigos, una travesti que declaró cuatro veces: las primeras para señalar al imputado y la última para acusar a la familia de la víctima haberla amenazado para incriminar al imputado. El segundo punto fue la incorporación de una escucha telefónica –prueba producida en la causa de asociación ilícita contra la banda de Los Monos en la que Vinardi nunca fue llamado a declarar– sin el testimonio del policía que debía validar esa conversación. Para la defensa la irregularidad fue una jugada parcial de los magistrados, por lo que pidió la recusación de dos de ellos, aduciendo que fueron jueces en la megacausa Monos de la que salió la cuestionada escucha. Pero su pedido fue denegado. El juicio se reanudará hoy por la mañana.
El juicio contra Vinardi comenzó el martes pasado presidido por los jueces Julio Kesuani, Gustavo Salvador y José Luis Mascali. El fiscal Guillermo Corbella acusó al Pollo de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y pidió 22 años de cárcel, en tanto la defensa, representada por Fausto Yrure, proclamó su inocencia y solicitó la absolución.
El fiscal sostiene su acusación en base a testimonios, en particular el de una de las hijas de Pared, quien dijo que escuchó el disparo dentro de su casa y al salir a la vereda se topó con su padre malherido que balbuceó el nombre de su agresor, Vinardi, a quien la joven dijo haber visto al volante de un vehículo que se fugaba. El otro es el testimonio de una travesti que ese mismo día declaró en la comisaría haber presenciado la escena en la que el Pollo, a quien dijo conocer, disparó. Sin embargo, el fiscal desistió ayer de “encontrar” a esa testigo, identificada como Brian O., quien en su última declaración, en noviembre pasado, se presentó en el Ministerio Público de la Acusación y denunció a otra hija de Pared de amenazarla, golpearla y robarle para que declarara en contra de Vinardi.
La hipótesis del fiscal es que la testigo cambió su último testimonio bajo amenazas del entorno del acusado. Pero la defensa no desistió y pidió que se investigue esta última denuncia.
Otro de los puntos tensos en la jornada de ayer fue la incorporación de una escucha telefónica que se sacó de la causa judicial contra Los Monos por asociación ilícita instruida por el juez Juan Carlos Vienna y que para el abogado defensor fue irregular. En la misma se escucha una conversación de agosto de 2014 entre un detenido (que para el fiscal es Ariel “Guille” Cantero desde el penal de Piñero) con otros dos hombres. En ella hablan de “una monedita para hacer lo contrario” y mencionan un reconocimiento positivo.
“Esa escucha fue ofrecida por el fiscal junto con la testimonial de un policía que podría contextualizarla. Pero el fiscal desistió de llevar al testigo, acompañando una nota de su superior Jorge Baclini, y pretendió que se incorpore la escucha sola”, explicó ayer Yrure, quien agregó: “La prueba material es una apoyatura para el testimonio. Las pruebas se incorporan a través de testigos, que le dan un sentido”. El letrado interpretó que “la incorporación irregular de esa prueba” fue una manera utilizada por los jueces para “ayudar” al fiscal a demostrar su teoría. Por eso pidió la recusación de dos de los tres magistrados, en particular porque fueron los mismos jueces que intervinieron en la megacausa Monos, de la que surgió la escucha cuestionada. Pero también ese pedido de Yrure fue rechazado por extemporáneo.
Pared fue asesinado frente a su casa de Doctor Riva al 2700 en febrero de 2013. Se presume que el móvil fue una disputa por drogas.
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