Un hombre fue asesinado y su hija resultó con heridas ayer por la tarde en medio de una discusión entre vecinos de barrio Ludueña tras el clásico entre Central y Newell’s, dijeron voceros policiales y judiciales. Según esta versión, un adolescente de 17 años y su padre tomaron a mal bromas por el resultado del partido; el mayor empuñó un arma de fuego y la descargó contra sus contendientes. Tras el hecho fue demorado el chico, aunque la Fiscalía dijo anoche que se determinó que quien disparó fue su padre. Luego de la balacera vecinos subieron a los heridos a un auto y los trasladaron hasta el hospital Centenario: el hombre falleció en el camino, en tanto que la chica, que había recibido un disparo en la cabeza, quedó internada fuera de peligro.
El relato de voceros policiales y judiciales fue similar: al término del clásico en cancha de Newell’s que terminó con la victoria de Central por 3 a 1, hubo cargadas entre vecinos en una vivienda de Gandhi al 5800. Las bromas fueron subiendo de tono hasta que un chico de 17 años y su padre, quienes viven en el lugar donde ocurrieron los hechos, no lo toleraron más y uno de ellos respondió con balazos. Según esta versión, el tirador disparó contra Omar Alcides Verón, de 44 años, quien recibió un impacto en el corazón; su hija Beatriz (la edad no fue precisada) fue herida en la cabeza.
El hombre, quien vivía en otra casa del barrio, a menos de cien metros de donde fue baleado, falleció en forma prácticamente instantánea, en tanto que la muchacha recibió una herida que no presentaba gravedad, dijeron desde Fiscalía.
En la vereda del hospital se habían agolpado al atardecer familiares de las víctimas que no podían contener su dolor.
Tras el ataque, el chico fue demorado en el lugar donde ocurrieron los disparos por personal policial, que lo alojó en la comisaría 12ª a disposición del juzgado de Menores en turno. El caso está a cargo del fiscal de Homicidios Dolosos Adrián Spelta, quien cuenta con el auxilio del personal de la PDI y la seccional 12ª. Anoche, se indicó que el adolescente no fue el autor del disparo sino su padre, quien se mantiene prófugo.
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