Una banda de ladrones rurales fue desbaratada ayer acusada de cometer al menos ocho golpes en diferentes localidades de los departamentos Caseros y San Lorenzo.
Los investigadores detuvieron a once rosarinos, dos entrerrianos y un nicoleño.
La investigación se inició hace dos meses atrás luego de que se registraran en la Fiscalía de Casilda denuncias de al menos ocho hechos delictivos ocurridos a familias en zonas rurales de diferentes localidades santafesinas. “Los allanamientos se realizaron en simultáneo en Rosario, San Nicolás y en San Benito que depende del departamento Paraná, Entre Ríos. Es una investigación que se llevó a cabo en conjunto con la fiscal Marianela Luna donde se buscaba una organización criminal que participaba de escruches y robos calificados con privación ilegítima de la libertad”, describió la fiscal Lorena Aronne en la conferencia que brindó ayer en la sede de la Gendarmería. La investigadora agregó que tras la docena de allanamientos se recuperó gran parte del botín sustraído, valuado en más de un millón de pesos.
Con respecto a lo secuestrado, pesquisas enumeraron una sembradora, un tractor, un carro como también herramientas e insumos agrícolas. Estos procedimientos en los que incautaron gran cantidad de armas de fuego se efectuaron en domicilios particulares y comercios. El saldo fue la detención de una docena de hombres y dos mujeres. Aronne detalló que once son de la ciudad de Rosario, dos de la provincia de Entre Ríos y un nicoleño.
Por su parte, las fuentes describieron que los ocho golpes ocurrieron en las zonas rurales de Arequito, Los Molinos, San José de la Esquina, Arteaga, Bigand, Fuentes y Pujato.
Pesado del Santa
Entre los rosarinos apresados está Héctor Adrián “Mafia” B., de 32 años. La Policía lo encontró en su vivienda de Chubut al 5500 y le secuestró un boleto de compra venta de una sembradora, la cual fue incautada por los pesquisas en San Nicolás.
El apodo del sospechoso apareció en una investigación del año pasado como cómplice de un homicidio en barrio Santa Lucía. En diciembre de 2015, cayó su compinche de siempre: Omar Epifanio Nego G., de 34 años. El hombre quedó detenido por al menos dos crímenes que surgieron en medio de la disputa por el territorio entre las bandas del Santa (por barrio Santa Lucía) y la de Las Palmeras. Por 2005, Nego y Mafia fueron señalados como parte de la banda de los encapuchados, un grupo de bandidos rurales que fue vinculado con asaltos en campos de la región y por el asesinato en Victoria del hacendado Jorge Bussi, de 58 años. Además, en 2012 estuvieron sindicados por el asalto a una empleada de Líder SRL, dentro de una sucursal del banco Francés de avenida Eva Perón al 7600.
Mafia también fue sindicado por el crimen de Hugo Strupeni, ocurrido en 2001.
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