A un día de la fecha límite para que los bonistas que ingresaron a los canjes de deuda cobren el dinero que la Argentina depositó hace un mes, funcionarios del gobierno volverán a reunirse hoy con el mediador judicial en el litigio con los fondos buitre, Daniel Pollack. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, confirmó que una delegación gubernamental viajó a Nueva York para seguir las tratativas y ratificar la postura de establecer condiciones de negociación “justas y equitativas”. Desde algunos sectores insisten en afirmar que Argentina ingresará en “default técnico”, mientras que para el kirchnerismo se trata de una situación inédita, porque el país cumplió con sus obligaciones y los acreedores no cobran por un impedimento del juez Thomas Griesa.
La Argentina volverá a pedir que Griesa reponga una cautelar (stay) y levante el posible embargo sobre fondos depositados en el Banco de Nueva York destinados al pago de vencimientos de bonos reestructurados. La otra posibilidad es que fondos buitre soliciten la medida a Griesa para que autorice el pago sin que cobren los holdouts, como lo establece la sentencia del juez.
No obstante, esa posibilidad está muy lejana ya que desde la designación de Pollack como mediador, tanto los fondos buitre como la Argentina no han modificado su posición ni el “special master” (como se lo denomina en Estados Unidos) consiguió acercar a las partes.
Pollack confirmó que “recibió un llamado del gobierno argentino” comunicándole el viaje de la delegación argentina para reunirse con él hoy a las 11 en Nueva York, 12 de la Argentina.
En la reunión, que se realizará en el estudio de Pollack, no estarán presentes los representantes de los fondos especulativos. En el encuentro tampoco participará el ministro de Economía, Axel Kicillof, ya que volverán a hacerlo los secretarios de Finanzas, Pablo López; y de Legal y Técnica, Federico Thea; y la procuradora del Tesoro, Angelina Abbona.
Por su parte, Capitanich advirtió ayer que la Argentina “necesita un stay” (un paraguas legal) y que el país “busca llegar a un acuerdo justo para todos los bonistas”, ratificando la posición que el gobierno mantuvo hasta ahora.
El funcionario recordó además que “a través de la historia todos los países del mundo han tenido distintas circunstancias con su deuda”. Y agregó: “Hemos tenido una actitud muy clara sobre garantizar estrategias de crecimiento para cumplir las obligaciones financieras que no fueron contraídas por este gobierno, y es necesario garantizar en términos de cumplimiento”.
En este sentido, Capitanich remarcó: “Que los argentinos sepan que se canceló la deuda con el FMI y se cumple regularmente con otras organismos multilaterales de crédito”.
Mencionó como ejemplo que “Argentina siguió generando mecanismos para resolver cuestiones pendientes, con el Ciadi (tribunal del Banco Mundial)”, y que “Repsol es otro ejemplo que se pudo resolver”.
Consideró que “los fondos buitre juegan a tres bandas: al mismo tiempo son poseedores de seguros por default, en mayor o menor medida juegan con los bonos reestructurados de deuda y con los títulos del canje hacen un menú que debería ser objeto de investigaciones en los Estados Unidos sobre la manipulación de cotizaciones, hacen un juego de tres bandas que pretende afectar a un país soberano”.
En tanto, el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli, le quitó dramatismo al asunto y aseguró que “no va a pasar nada” ante el posible default en que la Argentina incurriría mañana y consideró que el país vive una situación “inédita e insólita” por el fallo del juez Griesa.
Parrilli sostuvo que la Argentina “de ninguna manera está en default. La economía del país va a seguir en funcionamiento”, destacó el funcionario en declaraciones radiales y criticó a “los agoreros del desánimo y del desastre que siempre tratan de generar miedo”.
Griesa cese, Repsol cobra
El juez Thomas Griesa permitió ayer al Citibank concretar el pago de los intereses de los bonos que Argentina entregó a Repsol en resarcimiento por la expropiación de YPF, así como los títulos de igual especie emitidos en pesos y dólares que estaban inmovilizados por decisión del magistrado en el marco del litigio que el país enfrenta con fondos buitre.
Griesa dijo que “el tribunal no quiere perjudicar el acuerdo con Repsol y sólo por esta razón, rechaza de momento la moción de la querella de una reconsideración parcial” para que esos fondos no sean abonados. “Citibank puede realizar el pago de intereses correspondiente a los bonos Repsol y a los del canje en pesos y dólares mencionados en la resolución de Citibank. Pero el tribunal sólo permitirá el pago de los bonos del canje denominados en dólares por única vez”, señaló la orden.
Gobierno pagó la primera cuota del acuerdo con el Club de París
El Ministerio de Economía concretó ayer el pago del equivalente a 642 millones de dólares correspondiente a la primera cuota del acuerdo alcanzado para normalizar la deuda en situación de default que Argentina tenía con el Club de París. El pago, concretado dos días antes de la fecha prevista en el acuerdo, corresponde al capital adeudado y se inscribe en “el camino de regularización de los pasivos internacionales producidos por el default del año 2001”, señaló un comunicado del Palacio de Hacienda.
La fecha de mañana coincide con el plazo previsto para la concreción del pago a los tenedores que ingresaron a los canjes de 2005 y 2010, monto que Argentina ya depositó y que permanece congelado en las cuentas del Bank of New York por una decisión del juez Thomas Griesa, medida cuya continuidad podría determinar que Argentina caiga en default técnico.
“Cabe destacar que el acuerdo con el Club de París dispuso la cancelación total de la deuda contraída con ese foro de países e instruyó al Ministerio de Economía a adoptar las medidas necesarias a fin de ponerlo en ejecución”, recordó la cartera que conduce
Axel Kicillof. Además, en la página web del Ministerio publicaron detalles del acuerdo cerrado por un monto total de 9.690 millones de dólares, de los cuales 4.955 millones corresponden a deuda de capital, 1.102 millones a intereses y otros 3.633 millones de dólares a punitorios.
Este monto de 9.690 millones de dólares surgió “de la estricta aplicación de las cláusulas contenidas en los contratos oportunamente suscriptos” por el gobierno argentino, precisó el documento.
La consolidación del monto a pagar fue entonces el resultado de “un proceso eminentemente técnico pero sumamente arduo, ya que los contratos son numerosos y deben consolidarse con las también numerosas contrapartes”, ya que el Club está conformado por 16 naciones, y la deuda nominada en ocho monedas diferentes.
Además recordó que “la negociación con el Club se realizó sin la intervención del FMI, elemento que resulta inédito para los acuerdos de refinanciación que lleva adelante el organismo”.
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