Desde la costa de Rosario ya no se percibe sólo el humo. Anoche se podía ver el fuego en las islas y anticipaba los trabajos que están realizando los Brigadistas para combatir las llamas. La provincia de Santa Fe fue declarada en alerta naranja por los incendios en el delta del río Paraná, pero no son sólo los que se observan en la zona del humedal frente a Rosario, sino en los corredores viales de la provincia provocan que el humo gane terreno en la ciudad y todo el cordón costero hacia la capital provincial y hacia el sur. Los expertos hablan de que la sequía y las temperaturas que en varios casos rondan los 40 grados forman parte de un cóctel peligroso. La ciudad y toda su zona de influencia se agobia con el humo.
Los Brigadistas de Santa Fe y Entre Ríos combatían este miércoles las llamas que se reavivaron en el Delta del Paraná. Voceros de Protección Civil de Rosario indicaron que las causas de los focos no se limitan a quemas intencionales por parte de dueños de tierras para criar ganado o navegantes que generan fuego sin respetar las normas. “La sequía y las altas temperaturas jugarán un rol protagónico en los incendios que se generen este verano en la región”, advirtieron.
Las brigadas contra incendios de ambas provincias han logrado mitigar las llamas a la altura de la localidad santafesina de Villa Constitución, y el límite con la provincia de Buenos Aires.
En tanto, isleños del delta manifiestan su preocupación ante la posibilidad de que el fuego avance contra sus viviendas, como ya ocurrió en casas aledañas, por lo que piden que se intensifiquen los trabajos en zonas habitadas.
El martes, el Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema), junto con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, declaró la “emergencia ígnea en todo el territorio nacional” por un plazo de 12 meses, en función del “riesgo extremo de incendios de bosques y pastizales” debido a “un periodo de sequías prolongadas, de corrimiento de las temporadas secas en cada una de las estaciones y de temporadas sin lluvias”.
“Es como si hubieran abierto las puertas del infierno”, se escucha decir a un hombre frente a su casa de zona sur entrado en experiencia mientras se hace viento con una revista como si pudiera de esa forma espantar el humo y el calor.
Sin ley
Rodolfo Martínez, de la Multisectorial por los Humedales, aseguró que los focos se generaron “en distintas zonas y muchos de ellos, no están en la costa, lo que indicaría que fueron encendidos intencionalmente. La variable es la misma: no hay organismo que dé respuestas efectivas. Parece que nos toman el pelo”, sostuvo en declaraciones a LT8. Esos organismos “envían a los brigadistas, a quienes brindamos toda nuestra solidaridad, a poner la cara, pero hay que meter presos” a los culpables, exaltó.
Mientras tanto, la Ley de Humedales está a punto de perder estado parlamentario, pese a tener media sanción del Senado. “Salimos a la calle e hicimos una kayakeada histórica; más de 35 km por el río Paraná, para terminar en el Congreso de la Nación. La ley apunta a darle un ordenamiento al 21 por ciento del territorio nacional catalogado como Humedales; permitiría regular prácticas productivas y unificar las políticas a ejecutar por las provincias” “Lamentablemente, no darle tratamiento a la ley es una canallada de los legisladores”, concluyó.
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