Génesis Angelina Taborda Bruselario recibirá el bautismo el 12 de septiembre en la iglesia Nuestra Señora de Aranzazu de la vecina localidad entrerriana de Victoria. La pequeña tiene ocho meses y es noticia desde su concepción, casi un símbolo de las nuevas familias de estos tiempos. Fue gestada por su papá, Alexis, un rosarino que nació mujer y que está casado con Karen, una victoriense que nació varón. La Iglesia católica le abrirá las puertas en dos semanas, dando un paso más del lento camino que va transitando hacia la apertura a las minorías sexuales. “El bautismo no se niega ni se ponen condiciones por quién cría al bebe”, señaló el cura Raúl Benedetti, que oficiará la ceremonia y que se declaró amigo de la pareja. El bautismo será la primera aparición pública de la beba cuyos nueve meses de gestación tuvieron una difusión mediática internacional.
“Génesis no va a ser marginada”, dice Alexis Taborda, el joven padre y primer varón transexual argentino en dar a luz. “La gente quiere conocer a nuestra hija y puede ser por chusma, para ver si tiene los dos bracitos, si está bien formada”.
“Nosotros queremos que vean que Génesis es un ser humano como todos”, agrega.
La historia de Alexis y Karen recorrió todo el mundo. La panza del varón transexual estuvo en la pantalla de la televisión con Florencia de la V, Susana Giménez e incluso el National Geographic. Pero cuando la beba nació la pareja se encerró en una nube de amor, pañales y protección.
“La exposición fue nuestra, no quisimos involucrar a Génesis. Nos daba mucho miedo que le hagan daño. Hubo gente que habló maravillas de nosotros pero gente que no. Nos llegaron mensajes diciéndonos que nos querían matar, quemar, que éramos una aberración. Cosas muy feas y negativas”, recuerda Karen.
Los ocho meses que ya tiene Génesis se pueden seguir en el muro de Facebook de sus padres. No son los únicos primerizos y enamorados de su hija que cuentan cada aprendizaje y crecimiento del bebé. Hay relatos de días en el hospital, de noches en vela, tardes en el parque, visitas de familiares. No hay, sin embargo, una foto pública que los muestre a los tres. “Es hermosa”, describe Karen, que como todas las madres no encuentra otra palabra para hablar de su hija. Pero hace un esfuerzo y cuenta: tiene el pelo color miel, la piel blanca y los ojos color pardo, inmensos y con pestañas súper largas. “Es un torbellino”, resume.
Mientras Génesis va creciendo, ellos, cuentan, aprenden a ser padres día a día e incluso se animan a soñar con el hermanito. “Esperamos que mejore la situación económica y llegue”, aclara Alexis. Para los dos, y para la comunidad trans en general, conseguir trabajo es prácticamente imposible y sobreviven con changas como lo han hecho siempre.
Hace unos meses la pareja contó en su muro que iban a bautizar a Génesis y ahí volvieron los llamados y las exigencias mediáticas. Los padres decidieron que el bautismo es la ocasión ideal y feliz para que todos vean que una hija de padres transexuales con identidad autopercibida, que una niña que salió de la panza de su papá, es simplemente eso: una niña, una hija, una beba que como miles a diario también recibe la bendición de Dios, tiene dos brazos, dos piernas y le encanta hacer berrinches.
Karen es católica y para ella y su familia es muy importante el sacramento para Génesis.
“Es algo nuevo para la Iglesia porque somos nosotros los padres, pero ella es una criatura”.
Raúl Benedetti, el cura que tiene a cargo el bautismo, comparte la idea de la madre y afirma que no hay ningún problema para bautizar a Génesis.
“El bautismo no se niega ni se ponen condiciones; es algo normal, no se piensa en quién los cría”.
Benedetti es, desde febrero, párroco de la catedral de Gualeguaychú. Antes, estaba a cargo de la catedral de Victoria, donde bautizará a Génesis.
Desde que la pequeña estaba en la panza, él le pidió a los padres, a quienes considera sus amigos, que le concedieran ese honor y el próximo viernes viajará para cumplir con su deseo y compromiso.
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