Luego de meses de conflicto por falta de financiamiento, las orquestas del Bicentenario ubicadas en los barrios Triángulo, Tablada, Granadero Baigorria y Las Parejas retomarán el diálogo con el gobierno provincial para discutir la situación de precarización que sufren los docentes. El reclamo entró entre los 20 puntos que los sindicatos negociaron con el gobierno de Miguel Lifschitz, en el marco de la discusión paritaria. La propuesta implica la creación de una comisión técnica integrada por el sindicato de docentes Amsafé y el Ministerio de Educación para tratar la mejora de las condiciones laborales en los programas socioeducativos. Para los docentes de las orquestas se trata de la oportunidad de contar con un cargo, obra social, licencias y reemplazos por enfermedad. Una de las posibilidades es que los conjuntos –hasta ahora financiados por contratos obsoletos de Nación– se integren a los más de treinta ensambles de la Red de Coros y Orquestas de la Provincia. La expectativa está puesta en solucionar la crítica situación que atraviesan las agrupaciones creadas en 2010 por el gobierno nacional, el que desde la llegada de Cambiemos no reactivó el programa. La iniciativa busca integrar a chicos de barrios a través de la práctica musical. A raíz de los conflictos, muchos docentes debieron abandonar su cargo. Además, bajó la cantidad de chicos que asisten en Rosario y una agrupación quedó acéfala.
A destiempo
Rosario es uno de los últimos bastiones de la iniciativa orquestas del Bicentenario. El año pasado el gobierno de Santa Fe adelantó que si Nación no tomaba las riendas podía incluir a los conjuntos en la Red de Coros y Orquestas de Santa Fe, donde funcionan más de treinta agrupaciones de la provincia. El problema a resolver eran las condiciones de los docentes a cargo de los chicos. Menos de la mitad de los contratos de Nación llegaron a fines de febrero y aún no pudieron ser cobrados. El resto de los profesores todavía espera el suyo. A la vez, la provincia no renovó las horas cátedra que había dado para mantener los grupos a flote durante el 2016. En este contexto, muchos docentes decidieron abandonar las orquestas, como la directora de El Triángulo, Evangelina Gaido. Eso llevó a que menos alumnos continuaran. El conjunto de Granadero Baigorria pasó de contar con 100 chicos a 40 en 2017.
“Son proyectos muy importantes para los chicos. Aprenden no sólo desde lo musical, sino en la relación con los otros, la conducta y la autoestima. No es casual que se den en estas zonas”, señaló Javier Díaz, docente de trompeta de la orquesta de Baigorria.
“Nuestra idea es que el salario se empiece a equiparar con el resto de los docentes y mejoren las condiciones laborales. Lo malo de que se caigan los contratos es que se pierden los encuentros nacionales, las capacitaciones y conciertos federales”, agregó Díaz.
Congelados
A la espera de más de la mitad de los contratos, los docentes continúan dando clases sin cobrar para sostener el programa. El presupuesto que se otorgó desde la Presidencia de la Nación es el mismo de 2015. El sueldo de un docente de instrumento es de 2.545 pesos, sin obra social, ni aportes, por 8 horas cátedra. “Tenemos un trabajo precarizado. Los contratos que tenemos son hasta el 31 de diciembre. Muchos profesores dejaron las orquestas y están tendiendo a desaparecer”, señaló Díaz. El profesor contó que cuando un docente deja el cargo ese contrato se pierde y no se convoca un reemplazo, a excepción del cargo de director. Esa situación es la que atraviesa la orquesta El Triángulo. La directora renunció y se espera que finalice el concurso para el puesto vacante a fin de mes.
“Seguimos yendo a trabajar. Algunos sin cobrar nada aún. Siguen yendo para que no desaparezca el programa, pero se hace muy difícil”, concluyó el docente.
A la expectativa
La inclusión del reclamo entre los puntos aprobados de la paritaria vislumbra una oportunidad para salvar a las orquestas. La situación se enmarca en la precarización docente que atraviesa los programas socioeducativos y los espacios de innovación pedagógicos. Con el acuerdo, el gobierno provincial garantiza su compromiso de discutir mejores condiciones laborales: cargos docentes, escalafones, licencias por accidente o maternidad, obra social, entre otros. La idea en principio es sostener los contratos de Nación, y que las agrupaciones se integren progresivamente a la órbita provincial. Una de las posibilidades más tangibles es sumarlas a la Red de Coros y Orquestas, pero la discusión sobre el futuro de los conjuntos recién empieza.
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