Nada, ni las intensas lluvias que se registraron durante todo el fin de semana, impidieron que el sábado por la noche cerca de 20 mil personas vibraran en el estadio de Newell’s con el imponente concierto del guatemalteco Ricardo Arjona.
Por las inclemencias del tiempo durante algún momento de la tarde –como pudo conocer este medio– el show estuvo a punto de postergarse pero pasadas las 19 se resolvió su realización.
En el marco de su gira “Viaje tour” que lo tendrá hasta mediados de octubre en Argentina, el músico desplegó una de las más imponentes puestas que se recuerden en Rosario para, a lo largo de casi dos horas, atravesar todo su repertorio romántico que incluyó canciones de su último disco <Viaje< pero también clásicos de toda su carrera.
Dos años habían pasado de la última actuación del músico en la ciudad y la expectativa por volver a vibrar con uno de los más populares cantantes de la escena romántica actual se hizo sentir en el calor que su público, llegado de todas partes de la provincia, le tendió a su máximo ídolo.
Con un gran despliegue escénico que se repitió en cada canción del show, la noche comenzó a tomar forma con “A la luna en bicicleta”, tema elegido para dar el puntapié a la velada, a la que le se siguieron otros de su flamante disco como “Apnea” y “Lo poco que tengo”.
“Ni la lluvia, ni el viento, ni el tiempo: vamos a estar aquí hasta que se nos dé la gana”, arengó el músico para la aclamación de su público, mayormente femenino, que pasó la intensa lluvia a un segundo plano. Y, de buen humor, agradeció desde el escenario el aguante de la gente: “por permitirnos volver. Estamos felices de estar acá”, dijo el músico.
“La canción triste de las parejas perfectas” expresó antes de interpretar “Cavernícolas” de su último disco para, más tarde, despacharse con otros nuevos: “Viaje” y “Piel de pecado” mientras la imagen de la bella modelo Jésica Cirio (protagonista del videoclip original) era proyectada en la inmensa pantalla de fondo y las dos de alta definición de los laterales.
En la velada tampoco faltaron los clásicos de siempre que todos esperan: “Historia de taxi”, “Dime que no”, “Acompáñame a estar solo” y el infaltable “Señora de las cuatro décadas” para el que Arjona esbozó un juego: “Quiero ver lo que trajeron”, dijo antes que cientos de fanáticas levantaran carteles con consignas diversas: “Ya cumplí los 40”, “Tengo 49 y es mi último año”, o simplemente “Te amo”, se podía leer desde el sector reservado a la prensa. Tras examinar algunos, el músico marcó, a la “afortunada” mujer que apareció sobre el escenario. “¡Ella es Claudia!”, dijo Arjona quien la invitó a sentarse en su falta antes de cantarle al oído su himno a las mujeres de cuatro décadas.
Mención aparte para el escenario en dos niveles y la pantalla de altísima definición que permitió proyectar heterogéneas imágenes inaugurando climas y escenas que ponían en cuadros la música: desde una antigua estación de trenes con bancos y valijas, una inhóspita noche por callezuelas de adoquines en donde un taxi circula sin rumbo, hasta un campo abierto o paisajes de Latinoamérica como ocurrió, por ejemplo, al interpretar “Si el norte fuera el sur”, una de las últimas canciones de la noche. Pero todavía quedaba tiempo para más: “Pingüinos en la cama”, “Te conozco” y “Fuiste Tu” fueron las canciones elegidas para empezar a despedirse de Rosario.
Con veintitrés años de carrera, Ricardo Arjona lleva más de veinte millones de discos vendidos, diecisiete editados, quince de estudio y dos discos en vivo. El “Viaje tour” que incluye más de veinte países, en Argentina ya pasó por Mendoza, Córdoba y Rosario y, con diecisiete conciertos programados, llegará el miércoles a Buenos Aires para ofrecer siete shows en Geba y más tarde continuar su gira por Corrientes (5/10), Salta (7/10), Santiago del Estero (8/10), Mar del Plata (11/10), Neuquén (13/10), Comodoro Rivadavia (15/10) y despedirse del país en Trelew (16/10).
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