El colectivo ambientalista “El Paraná no se toca” logró el pasado sábado, durante una de sus recorridas por los humedales del río Paraná, el primer registro fotográfico de gato montés sudamericano o gato de Geoffroy (científicamente conocido como Leopardus geoffroyi), considerado como “especie casi en peligro” de extinción según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. El felino es uno de los predadores naturales de pequeños roedores, como el ratón colilargo, transmisor de leptospirosis, y fue hallado justamente a dos kilómetros del sitio donde el año pasado falleció una persona a consecuencia de la enfermedad.
Ya se tenía conocimiento de la presencia de esta especie de felinos en el Delta del Paraná, pero ésta es la primera documentación fotográfica conocida para la zona de islas que pertenece a la Municipalidad de Rosario. El gato montés sudamericano_ lo mismo que otras especies como la nutria, el carpincho o el lobito de río, todos parte de la fauna de los humedales del Paraná_ fue diezmado debido a que su cuero era apreciado por la industria peletera orientada a la exportación, refirió a El Ciudadano Maximiliano Leo, integrante de El Paraná no se toca. En los últimos tiempos, con el creciente rechazo a ciertas “ostentaciones” casi obscenas como la de las vestimentas de piel, la caza del felino disminuyó y comenzó a recuperarse en número de ejemplares. El Paraná no se toca viene realizando un relevamiento de flora, fauna, cursos de agua y manejo de ganado en un sector de islas comprendido entre la altura de Puerto General San Martín y la de Rosario, y desde el arroyo San Lorenzo hasta el curso principal del río. Es la primera vez en este estudio que se observaron dos parejas de Leopardus geoffroyi, un indicio de que el felino aprovecha los chilcales (zonas de un tipo de arbusto endémico) y montes arbolados de las islas para reproducirse y así prolongar la especie.
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