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Buscan reducir mortalidad por cáncer de mama

La Unión Latinoamericana Contra el Cáncer de la Mujer, que fue presentada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, manifestó la necesidad de contar con mejores estrategias de prevención.

Organizaciones no gubernamentales argentinas adhirieron a una alianza regional, que busca reducir la mortalidad por cáncer de mama y mejorar el acceso a la detección y tratamiento de esa enfermedad, de la que se diagnostican cerca de 17 mil casos anuales en el país.

La Unión Latinoamericana Contra el Cáncer de la Mujer (Ulaccam), que fue presentada en la ciudad de Buenos Aires, en vísperas del Día Internacional de la Mujer, manifestó, entre otros puntos, la necesidad de contar con mejores estrategias de prevención.

La Ulaccam está integrada por la American Cancer Society (ACS) y por Argentina adhirió la Liga Argentina de Lucha Contra el Cáncer (Lalcec), el Movimiento Ayuda Cáncer de Mama (Macma) y la Fundación para la Investigación, Docencia y Prevención del Cáncer (Fuca).

El cáncer de mama es una enfermedad tumoral maligna localizada en las mamas, que si bien se presenta en las mujeres y es en Argentina la primera causa de muerte por tumor en el sexo femenino, también puede afectar a hombres en muy baja proporción. Los principales factores de riesgo para padecer la enfermedad son la edad, ya a que a mayor cantidad de años hay mayor riesgo; antecedentes familiares; ciertas alteraciones genéticas; haber padecido cáncer en una mama, y alteraciones de la reproducción.

“Las tres entidades argentinas que integramos Ulaccam nos unimos con el objetivo de reducir la mortalidad por cáncer de mama, empezando por la detección temprana”, destacó María Graziella Donet, presidente de Lalcec.

La especialista dijo que para la detección temprana “es esencial que actuemos en forma coordinada el Estado, profesionales de la salud, ONGs, y la sociedad empezando por la concientización en todos los niveles”.

“La mujer debe realizarse un control anual con un especialista en ginecología, que debe indicar los estudios pertinentes; los centros de salud deben contar con equipamiento de calidad y se deben agilizar los trámites, entre otras medidas importantes, que contribuyen a disminuir las muertes por cáncer de mama”, explicó.

Un estudio dado a conocer en el encuentro de la Ulaccam sobre el estado del control del cáncer de mama en la región señaló que anualmente en Argentina se detectan 17 mil nuevos casos, la mayoría en mujeres mayores de 60 años, y causa 5.400 muertes.

Reinaldo Chacón, médico especialista en Oncología y director Académico del Instituto Alexander Fleming, destacó que la mamografía es uno de los pilares del diagnóstico temprano del cáncer de mama, que permite tratar la enfermedad en estadios iniciales con un pronóstico más favorable.

Chacón aludió a la necesidad del acceso uniforme a ese estudio que debe ser anual después de los 40 años, porque indicó que “la cobertura de mamografías en el país varía entre el 75 por ciento en la ciudad de Buenos Aires y el 14 por ciento en otras provincias”.

“Sería sumamente importante garantizar que todas las mujeres pertenecientes a la población de riesgo puedan acceder a un control periódico y a la disponibilidad de los más modernos métodos de diagnóstico”, sugirió.

Además de los análisis para poder detectar a tiempo el cáncer de mama, también es importante adoptar hábitos de vida saludable como evitar la obesidad, la inactividad física, el consumo de alcohol y el tabaco, para poder prevenirlo.

Una vez diagnosticado el cáncer de mama, se lo clasifica según su etapa, y se implementan distintos tratamientos, que incluyen terapias farmacológicas, radioterapia y cirugía.

María Alejandra Iglesias, presidente de Macma, precisó en que es importante que la mujer consulte regularmente a su médico, y que tenga la constancia de hacerse los estudios que le soliciten.

Las ONGS pidieron en un documento estandarizar el acceso a la detección temprana, prevención y tratamiento del cáncer de mama en el país, asegurar la utilización de recursos físicos y tomar acciones para cambiar la concentración excesiva de recursos humanos especializados en ciertas regiones.

También, disminuir las desigualdades de infraestructura y recursos para la atención del cáncer de mama entre las diversas provincias y llegar con mastógrafos móviles a las comunidades rurales de más difícil acceso.

Susana Korinfeld, directora Ejecutiva de Fuca, destacó que la creación del Instituto Nacional del Cáncer (INC), en 2010, “fue un gran avance para liderar la coordinación de todos los esfuerzos realizados por el sector público, privado y de la sociedad civil”.

No obstante, opinó que “queda pendiente el desafío de llevar adelante más acciones sistemáticas para la prevención y control de cáncer de mama, sobre todo en algunas regiones del interior”.

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