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“Operación Masacre” on line

La obra de Rodolfo Walsh tiene su espacio en internet con el fin de mostrar cómo fue la investigación, con mapas digitales que muestran el recorrido del periodista. A 54 años, la crónica sigue viva.

Cuando se incursiona en los primeros pasos del periodismo desde el lugar de un simple estudiante, se comienzan a conocer textos que deslumbran, informan y construyen (o reconstruyen) un fragmento de la historia nacional y propia. Una de esas obras es el trabajo que realizó el periodista y escritor Rodolfo Walsh: Operación Masacre. El auge de la tecnología y la renovación en los medios de comunicación plantearon el interrogante sobre cómo hubieran aportado herramientas las redes sociales a la investigación de los fusilamientos de José León Suárez ocurridos en 1956. Algo de esto se puede ver en www.proyectowalsh.com.ar. A través de este vínculo con el mundo digital, se difunde la investigación periodística de Walsh con datos, fotografías y mapas, para “seguir de cerca” el trabajo.

A fines de 2010 se conoció Proyecto Walsh, un trabajo periodístico y experimental que busca hacer un recorrido a través de la obra fundamental del reconocido periodista argentino, que desnuda la trama oculta de lo sucedido en los fusilamientos de José León Suárez, aplicando los recursos digitales de la web social.

“Intentando responder esta hipótesis y respetando los tiempos originales de la investigación que realizó Walsh entre 1956 y 1957, a diferencia del recorrido privado del autor, se publicará en una cuenta de Twitter (@rodolfowalsh) información del día a día de su trabajo en primera persona”, explicó Álvaro Liuzzi, periodista, blogger y cocreador (junto a Vanina Berghella) de este proyecto digital en una entrevista realizada por el diario Perfil.

Ante la frase “hay un fusilado que vive”, Walsh comenzó la investigación que se publicara luego en 14 partes.

Para Carlos Del Frade, periodista y escritor de Rosario, la “obra maravillosa de Walsh debe tener la mayor difusión posible”, manifestó a El Ciudadano y aprobó la idea generada en Twitter “siempre y cuando se pueda conocer un poco más del trabajo humano que realizó el creador de esta obra periodística e histórica inigualable”, continuó el rosarino.

Entre las herramientas digitales con las que cuenta el Proyecto Walsh están las de Google Maps, herramienta gracias a la cual se geolocalizarán los principales escenarios donde transcurrieron los hechos más importantes de la investigación de Walsh: el basural, las comisarías, las casas de los fusilados y cada lugar recorrido serán espacios protagonistas del proyecto como una especie de diario de viaje periodístico. Además, serán publicadas imágenes de cada sitio y se generará una línea de tiempo interactiva para poder seguir paso a paso su trabajo.

Mediante entrevistas y materiales que aporten análisis e interpretación al proyecto, la idea es trabajar sobre un eje contextual que brinde una perspectiva histórica (y en tiempo real) del proceso de investigación que llevó Operación Masacre hace 54 años, de acuerdo con lo que explicaron sus creadores el 18 de diciembre, cuando se dio inicio a esta experiencia virtual.

“Este trabajo es un homenaje a la obra de Walsh, a su compromiso por la verdad y su valentía innovadora dentro del periodismo. Es un reconocimiento de la obra, con la obra”, señaló Liuzzi.

La investigación que hizo historia

Del Frade explicó: “Con esta creación se demostró qué es el periodismo de investigación: es una tarea humana, que implica hablar con las fuentes, mirar a los ojos a los entrevistados, contrarrestar documentos con los hechos oficiales, y no hay tecnología que supere esa labor”.

El periodista, autor de títulos como Historia política de la esperanza o La marcha grande, aseguró que “no hay herramienta digital que supere la palabra de un testigo o el valor de un documento oficial. El periodismo sigue siendo la entrevista cara a cara, el mirar a los ojos, ir al lugar de los hechos”.

A su vez, destacó que Operación Masacre haya sido creada en base a cuatro fuentes de información, “nada más y nada menos”, sostuvo Del Frade, además del archivo judicial y la elaboración de tres historias: la oficial, la contraoficial (cuando Juan Carlos Livraga le informa que “hay un fusilado que vive”) y la síntesis para parir esta investigación”.

Ante la pregunta de si los medios digitales hubieran agilizado y enriquecido el trabajo de Walsh, Del Frade fue concreto: “Son elementos más, en todo caso siempre hay que chequear todo, de eso no se salva nadie”.

Asimismo, y continuando con los elogios al libro publicado hace 54 años, remarcó: “Estas notas se publicaron en un semanario de poca tirada que fue ganando lectores con cada impresión. La gente hoy sigue buscando leer e informarse de las cosas que pasan, pero de aquellas que muy poco se saben. Tenemos que ser concientes de que el periodismo depende del periodista, del laburante y no de los medios de comunicación. El mejor periodismo es aquél que tiene las mayores fuentes de información precisas. Hoy, lamentablemente, los empresarios deberían invertir para que los periodistas sean lo más independiente posible, pero eso no pasa y volvemos a una etapa trillada: la libertad de empresa, en vez de prensa”.

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